Política

Cambio de régimen

  • Peor para la verdad
  • Cambio de régimen
  • Humberto Zurita Eraña

El sistema político mexicano ha pasado de un presidencialismo absoluto y de un partido único a la alternancia en el poder en sus diferentes niveles de gobierno, desde el municipal hasta el Ejecutivo federal. A lo largo de los últimos 30 años, la geopolítica de nuestro país se ha ido modificando con base a resultados electorales, consolidando nuestra democracia.
En este sentido, el cambio de poderes se ha ido institucionalizando, lo que también demuestra madurez política por parte de los diversos actores, independientemente de sus filiaciones políticas. La calificación de las gestiones sigue estando en poder de los ciudadanos, que con su voto pueden decidir quienes los gobiernan y los representan.
Pero existe una asignatura pendiente, que es el cambio de régimen. Entendiendo que el cambio de régimen no se agota en el resultado electoral, sino que tiene su base de cambio justamente en la voluntad ciudadana que con sus votos determina si quiere que continúen gobernándola la misma clase política o decide por un cambio.
Cuando se viene de un antiguo régimen, en el que existía un sistema político en el que el poder giraba en torno a un solo partido, con intereses económicos sólidos en su entorno e incluso con códigos de conducta que formaron parte de la liturgia política, estamos hablando incluso de una cuestión cultural que puede resultar muy difícil de cambiar.
Por supuesto que no estamos planteando que un cambio de régimen signifique llevar a la guillotina, como si fuera la Revolución Francesa, a quienes formaron parte del sistema, pero si significa que se vayan sustituyendo los intereses creados, sean políticos, económicos o incluso sociales.
Si no se genera esta sinergia de sustitución, no se está propiciando un cambio de régimen. Y aunque es válido, bajo argumentos de mantener la gobernabilidad y los equilibrios, las decisiones pragmáticas, es importante valorar que en esta etapa de empoderamiento de la sociedad, el revalidar a personajes que directamente fueron actores del antiguo régimen, y que sobre todo en su papel, cargo o comisión tuvieron relación con los intereses creados, que fueron incluso en su momento señalados como participes de decisiones que afectaron la economía, el desarrollo político e incluso los derechos y libertades públicas, se asume un costo que tarde o temprano va a tener un impacto político o electoral.
También tomemos en consideración que junto con la democracia se ha fortalecido a la opinión pública, que cada vez es más crítica y disecciona los casos más allá de los estereotipos o adjetivos, ¿no cree Usted?

Google news logo
Síguenos en
Queda prohibida la reproducción total o parcial del contenido de esta página, mismo que es propiedad de Notivox DIARIO, S.A. DE C.V.; su reproducción no autorizada constituye una infracción y un delito de conformidad con las leyes aplicables.
Queda prohibida la reproducción total o parcial del contenido de esta página, mismo que es propiedad de Notivox DIARIO, S.A. DE C.V.; su reproducción no autorizada constituye una infracción y un delito de conformidad con las leyes aplicables.