Ver en cartelera el título de El cascanueces significa que llegó la Navidad, pues la trama de esta inmortal historia está ubicada precisamente en estas fiestas.
Se trata, sin duda, de unos de los relatos más significativos de esta época, y en cuya gestación bien vale la pena detenerse algunos párrafos.
El cascanueces y el rey de los ratones es el título original del cuento escrito por el prusiano E.T.A. Hoffman, en 1816. La historia trata sobre el nuevo juguete de la joven Marie, el Cascanueces, recibido la noche de navidad, que cobra vida y, después de derrotar al Rey Ratón tras una dura batalla, la lleva a un reino mágico poblado por muñecos.
Para 1844, el francés Alejandro Dumas hizo una adaptación al relato, al que título Historia de un cascanueces, y fue precisamente esta versión la que medio siglo más tarde, en 1892, sirvió de base al ballet que se ha hecho esencial en el mundo entero, donde renace cada fin de año.
El gran compositor ruso Piotr Ilich Tchaikovski, y los míticos coreógrafos Marius Petipa y Lev Ivanov son los autores de este espectáculo que este año está celebrando 130 años de vida, pues ofreció su primera función el 18 de diciembre de 1892 en el teatro Mariinski de la ciudad de San Petersburgo.
En su versión ballet, la historia es materialmente la misma: Clara es una niña a quien su padrino, el juguetero Drosselmeyer, le regala en la víspera de Navidad un misterioso y mágico cascanueces con el que viajará al país de Azúcar, lugar donde habitan mágicos personajes.
Ahora, luego de los años de ausencia obligada por la pandemia, El cascanueces regresa al magno escenario del Auditorio Nacional con la actuación de los integrantes de la Compañía Nacional de Danza, que ofrecerá funciones a partir del 16 de diciembre.
El cascanueces es uno de los montajes de repertorio de la CND, que lo presentó por primera vez en 1980 en el Palacio de Bellas Artes y, da la altísima concurrencia, en 2001 se trasladaron al Auditorio Nacional, en una puesta en escena renovada que incluye el trabajo de algunos de los creativos más prestigiados de nuestro país: escenografía de Sergio Villegas, vestuario de María y Tolita Figueroa, e iluminación de Laura Rode.
La coreografía, versión de Nina Novak, da vida a copos, flautas, bombones, chinos, ratones, soldados, angelitos y demás personajes del país de Azúcar, acompañados por la Orquesta del Teatro de Bellas Artes, dirigida por Iván López Reynoso.
En la puesta en escena participan estudiantes de la Academia de la Danza Mexicana y de la Escuela Nacional de Danza Clásica y Contemporánea, del INBAL.
Para la dirección de la CND, explica la información oficial, “montar nuevamente esta obra universal significa volver a reencontrarse con su audiencia, acercar al público de todas las edades al ballet, a través de una historia con la que todos se identifican, y representa una oportunidad para que niñas, niños y adolescentes de danza clásica, que se están formando como bailarines, desarrollen su talento al lado de profesionales de este arte”.
Las funciones de El cascanueces son las siguientes: 16, 20, 21 y 22 de diciembre a las 20:30 horas; el 17 a las 16:00 y 20:00 horas; el 18 a las 13:00 y 18:00 horas, y el 23 a las 16:00 y 20:30 horas. Los boletos ya están a la venta en taquillas del Auditorio Nacional y en Ticketmaster.
Disfrutar de El cascanueces, de verdad es una experiencia inolvidable, de ésas que marcan para toda la vida. No hay que perdérsela.