Los niños no tienen la culpa.
Lo ocurrido en Monterrey nos tiene atónitos, tristes y consternados. El hecho de que un menor de edad, alumno de una escuela privada, porte un arma y dispare a su maestra y compañeros y al final se dispare así mismo es, sin duda, un evento sin precedentes en México. Tal parece que cada vez estamos más cerca de lo que hemos visto que ocurre en otras latitudes y que habíamos desestimado como algo que algún día nos alcanzaría: ya sea un tiroteo en un bar turístico de algún país hasta una balacera al interior de una escuela primaria o secundaria, eventos que lamentablemente ya se registraron en la historia roja de México.
¿Por qué ocurren estos hechos? ¿Quiénes son los responsables? ¿Cómo fue la actuación de la autoridad en dichos casos? ¿Qué explica estas manifestaciones insospechadas de violencia en México? ¿Qué influencia tienen los hechos ocurridos en otros lados? ¿Qué relación hay entre el ambiente de violencia que se vive en México y estos actos?... Ojalá haya autoridad que responda alguna de estas preguntas, pues por ahora no ha habido quien tome el “torno por los cuernos“. Entre tanto, la incertidumbre social y la violencia en el país sigue creciendo... Tal parece que en este país, con tantos interesados en presidirlo y gobernarlo, no hay valiente que asuma la más mínima responsabilidad y mucho menos quién esté decidido a combatir y atemperar estos hechos… mientras eso ocurre, el daño está hecho…
Y del trío de niños muertos en Guanajuato, mejor ni hablamos.
Llegó el día.
En unas horas asume Donald J. Trump como presidente constitucional de los Estados Unidos. El célebre 20 de enero será el día de la asunción del mandatario número 45 de aquel país, quien es, también, el primer presidente norteamericano de carrera no política y, además, el de mayor edad al asumir el cargo en la historia del país, superando por ocho meses a Ronald Reagan y por el doble a Hillary Clinton.
En estos días, tres temas dieron de qué hablar sobre Trump: quien ha insistido en que México pagará por el muro; de quien dicen influyó determinantemente en que General Motors resolviera reducir su inversión en México y; que no le gusta tuitear: “No me gusta tuitear, pero debo hacerlo“ (…) “Pero los medios de comunicación son muy deshonestos. La prensa es muy deshonesta. Es mi única forma de contar la verdad. Cuando la gente dice cosas equivocadas sobre mí, puedo decirlo, des mentirlo. Cuando la gente me malinterpreta, porque los medios son muy deshonestos, esta es mi forma de decir: «Bueno, es una declaración falsa»”, dijo Trump. “Si la prensa fuera honesta, yo sin dudas no usaría Twitter”, aseguró.
Asimismo, aprovechó para hablar de las celebridades que salieron a decir que no cantarían en su asunción y dijo que nunca fueron invitadas a hacerlo. Entre tanto, volvió a insistir en que no le interesan los famosos, al decir: “Quiero a la gente”.
Entre tanto, Trump asume ya su anhelado cargo y la verdadera historia de ese capítulo apenas comenzará a escribirse, con lo que ocurra esa noche, sus primeros cien días y cada una de las sui-géneris acciones que emprenderá hasta el final de su periodo, lo que aquí estaremos narrando oportunamente.
Extrañas novedades en el 22.
Para sorpresa de propios y extraños, hace unas horas, la nueva titular de la Secretaría de Cultura, María Cristina García Cepeda, nombró a Pedro Cota como nuevo Director del Canal 22. A decir de algunos especialistas, a Cota lo descalifican para emprender suertes televisivas-culturales. De cota se sabe que viene de un puesto en el gobierno federal donde se desempeñó en el cargo de Director del área “México-País“, desde sus oficinas en Los Pinos. Y antes de ello, el Sr. Cota Tirado se desempeñó como vicepresidente del club de futbol Necaxa de Televisa, entre otras actividades. La decisión del relevo de Tovar y de Teresa hace sucumbir la historia del Canal con todos sus años y esfuerzos por representar dignamente a la Cultura nacional, desde la perspectiva institucional, y a partir de un proyecto de representación social e intelectual con el que se fundó hace casi tres décadas.
Vale la pena señalar que esta decisión, con todo y que no ha sido bien vista por un sector crítico y especializado en la materia, entre otras cosas, deja fuera a un hombre que venía haciendo el trabajo que ahí hay que hacer. Ernesto Velázquez Briseño, quien había arribado al Canal 22 apenas hace 15 meses, y que más de dos décadas las había dedicado a la televisión cultural, como subdirector del propio 22 y como Director de Tv Unam, es desprendido de sus funciones y enviado a la Fonoteca Nacional. Sin duda, algo bueno hará ahí. Mientras tanto, queda la duda de qué pasará en el renovado canal institucional, el cual recién había superado una crisis de liderazgo y serias inconformidades de sus empleados cuando Raúl Cremoux, el antecesor de Velázquez, hubo de ser despedido por irregularidades en su cargo, mismo que había aceptado del propio Tovar y de Teresa al inicio del sexenio actual, reemplazando al director de entonces, el escritor Jorge Volpi, hoy funcionario de la UNAM.