Feliz por la temporada recién concluida con el merecido triunfo de KC, rompiendo el paradigma de que las defensivas ganan los campeonatos, en este caso ganó el equipo más agresivo, el que se la jugó en cuarta, con pases largos, con un coach ajedrecista y el QB más completo que la liga ha visto nacer en años (sorry Lamar) P. Mahomes, ajeno al coach y playbook hizo variantes propias, salvó jugadas rotas en todo el playoff hasta ganar el campeonato y ser el merecido MVP del SB. Hay que reconocer la calidad y futuro de ambos equipos, no dudo que serán los referentes de este primer lustro de los 20s y dentro de esta generación están gestándose nuevas leyendas.
En contraste, sigue la necia novela del “viejo” Tom Brady, le ofrecieron 30 millones de dólares que considero muy buenos para su edad y más con su bajo desempeño en 2019. Veremos en qué acaba eso, creo que lo mejor es retirarse en Pats pero Bill Belichick ya no lo quiere y eso genera un conflicto con el dueño Kraft quien tiene a Brady casi como un familiar, lo que parecía ser el trío perfecto del éxito se está volviendo un conflicto de intereses, para volver a ser contendientes, creo que la decisión de Belichick es la que debe pesar más en pro del equipo.
Pero bueno, terminando una cosa arrancó otra qué podría resultar muy interesante o ser simplemente un fiasco entre las temporadas de la NFL: El resurgimiento de la liga XFL, que hizo kickoff con 8 equipos, los juegos estuvieron sinceramente entretenidos y por momentos fuera de no conoce casi nadie, se olvida que no es la NFL. Pero antes revisemos su origen: Es resurgimiento porque es el segundo intento del empresario Vince McMahon quién ya había fracasado con esto en el 2001, y no es el único intento, entre otros, hace un par de años nació y murió la Alliance of American Football (AAF) la cual quebró antes de siquiera darse a conocer.
¿Por qué habría de haber diferencia en esta ocasión en el destino de la XFL?
Para empezar, en este intento se ha conjugado un mejor equipo de ejecutivos, Oliver Luck es el comisionado, ex jugador y papá del recién retirado QB Andrew.
Lo más importante es que dicen contar dinero para financiar 3 años de la liga, eso nos permitirá “calarla” y ver si logra el apego de los aficionados y mantenerse.
Para retar a la NFL aparte de dinero hay que tener estrategias deportivas y de mercadotecnia, la XFL ofrece varias:
Una de las mejores es que jugarán en el periodo de descanso de la NFL, el que nos tiene hambrientos de americano, si bien el Draft y el Combine son interesantes, no hay de acción en el periodo. Si la XFL trae un espectáculo creíble y de calidad, seremos afortunados por primera vez de ver americano todo el año. Lo visto este fin de semana no fue nada malo, la liga reclutó entre coaches y jugadores a lo “mejor” que no alcanzo lugar en la NFL sumando rookies de buena cepa
Y quién sabe, sí las dos ligas son suficientemente atractivas, igual y un día nos inventen un juego entre sus campeones. Se vale soñar.
La intención en el campo es lograr un juego más dinámico, con más puntos y menos lesiones. Hay reglas que contrastan con la NFL, veamos:
En patadas de despeje nadie podrá moverse hasta que el balón sea atrapado por el equipo que recibe o después de 3 segundos de tocar el piso, las líneas tendrán una separación de 5 yardas evitando los riesgos de correr 25 yardas antes del golpear. En despeje cuando el balón salga por diagonales o laterales, será colocado en la yarda 35 del equipo que recibe, esto logrará jugadas de equipos especiales con más protagonismo permitiendo más yardaje y obligando al que patea a jugarse más cuartas oportunidades en lugar de entregar el balón.
El gol de campo mantiene pero el punto extra ya no será patada y ahí se puede optar por un punto con jugada desde la yarda dos, dos desdé la cinco y tres puntos saliendo de la 10. Si la defensiva intercepta y anota suma los mismos puntos por los que se llevó a cabo la jugada.
No hay tiempo extra ni empate. El juego se resuelve con un shootout de 5 jugadas para cada team, si un equipo es inalcanzable como en el caso de que lleven tres posiciones a favor con cero en contra, ahí acaba el juego. En caso de empate en las 5 series, se juega a muerte súbita una jugada por equipo y el primero que falle cuando el otro anota pierde.
Una regla muy atractiva es que aquí se pueden lanzar pases laterales hacia adelante o hacia atrás mientras no se rebase la línea de scrimmage. Recordemos que en la NFL nada más se puede pasar hacia atrás para que un jugador pueda volver a lanzar al frente. Esto va a generar una gran dinámica en jugadas con opciones de doble QB, reversibles y fintas obligando a las defensivas a cuidar el perímetro de una manera distinta a cómo se hace actualmente.
El tiempo entre jugadas baja de 40 segundos a 25, lo cual hace más rápido el jugo, dentro de los dos minutos finales de cada tiempo, el reloj se va a detener hasta que se haya colocado el balón, evitando que el equipo ganador especule con el reloj y obligándolo a seguir jugando con ritmo.
Por último, nada más hay dos tiempos fuera. Todo esto promueve un juego más entretenido, sin tiempos muertos ni tantos anuncios aprovechando el reloj al máximo sin esperas tan largas como en la NFL.
Veremos más puntos y velocidad al estilo del básquetbol contra el ritmo pausado que se traía desde el rugby.
La temporada ya arrancó, hay que darnos tiempo de ver cómo evoluciona la XLF y cuidarnos de ser objetivos y listos para romper nuestros propios paradigmas y la costumbre a los puros equipos de la NFL, eso nos puede crear sombras para disfrutar lo que pudiera ser un nuevo y buen espectáculo.
Recordemos que de funcionar, ganaríamos todos al poder ver americano todo el año. Espero que así sea.
Y de ahí a lo que sigue
Herberto de la Rosa