La NFL nos ha brindado otra excelente entrega de calidad y competitividad, basta ver los resultados que se definieron en el último minuto incluyendo partidos con varias volteretas de marcador y tiempos extra. Hay demasiado para comentar.
Cosa rara ver la bronca en el juego de Santos contra Bucs, resultando con jugadores expulsados; cabe mencionar que esa bronca la inició Tom Brady haciéndose de palabras con un defensivo, al GOAT se le vio muy irregular en su juego y, peor aún, muy molesto y haciendo berrinches que no van con su edad y posición jerárquica en el equipo. Afortunadamente para él, y a pesar de su desesperación, su defensa fue la que hizo la chamba para ganar el partido ayudados por el hecho de que el QB de Santos, Jameis Winston, volvió a su romance con las intercepciones y le dio al traste a un juego que era muy cerrado; yo le echo a Winston la culpa de la derrota de su equipo.
Es buena noticia ver a equipos como Cardenales, Delfines y Jets ganando, son teams con muchos fans que necesitan ser competitivos y requieren esas victorias. Este domingo los tres fueron espectaculares en resolver sus juegos. Para Miami, aunque destacó el QB Tua Tagovailoa con seis pases de anotación, yo le achaco la victoria al WR Tyreek Hill, con atrapadas y anotaciones que le dieron motivación extra a los Delfines.
Para Jets, su defensiva hizo el trabajo, pero creo que Joe Flacco tiene un gran mérito, ya que se vio como el mariscal de experiencia que este equipo espera tener.
De Cardenales, un aplauso al QB Kyler Murray, quien se desvivió para sacar el partido y lo logró.
De los mariscales que llegaron a ser rescate en otros equipos vimos fallar a Mitch Trubisky con Pittsburgh, ante unos Patriotas que parecen ir mejorando desde el año pasado con mérito para el QB Mac Jones, que se ve muy estable al frente.
Gran decepción la del QB Matt Ryan al frente de los Colts, una ofensiva inoperante, no dudo que lo puedan sentar si vuelve a dar otra actuación tan mala y lo mismo puede aplicar para Ryan Tannehill de Titanes, que se vio terrible en su juego ante los Bills.
Los Vaqueros dieron el campanazo, se pensaba que iban a quedar débiles sin Dak Prescott, sin embargo, el relevo, Cooper Rush, sacó la casta y los llevó a una victoria que estaba en contra de las casas de apuestas. También por los Cowboys brilló el defensivo Micah Parsons con dos sacks, aterrorizando a Joe Burrow todo el juego. Cincinnati y Raiders necesitan un brujo o chamán porque es inexplicable cómo no pueden mantener sus ventajas.
El precio de las lesiones fue muy alto, destacando la del QB de los Niners, Trey Lance, quien salió con una fractura de tobillo que le costará toda la temporada, una verdadera lástima, sin embargo, los 49ers no quedan desamparados, ya que en la banca está Jimmy Garoppolo, un tipo con nivel de Supertazón, capaz de sacar a ese equipo adelante. De hecho, el domingo terminó el partido muy bien, resolviendo a favor el resultado.
En las menciones honoríficas entran Patrick Mahomes, QB Josh Allen, WR Stefon Diggs y ni hablar del WR Cooper Kupp, que sigue haciendo cosas increíbles en el campo y el domingo llevó los Rams a su primera victoria.
Otro fenómeno es el corredor Nick Chubb, parece de otro planeta ajeno a que Cleveland no supo mantener su ventaja.
Aguas con el novato defensivo de Detroit, Aidan Hutchinson, que se despachó con tres sacks, imagínense lo que va a pasar cuando agarre más confianza.
Y de ahí... a lo que sigue.
Herberto de la RosaTwitter: @herbertodlarosa