Dicen los "coaches", que su "disciplina"; el coaching, tiene sus orígenes en la mayéutica de Sócrates. Aunque intento construir una fantasía, no me imagino a Sócrates en pleno esplendor Helénico, especulando en el ágora con "porras" psicológicas, discursos narcicistas o clichés fáciles. Pobre Sócrates, fue el primer "coach" sin saberlo ¡Gracias a todos los dioses! o habría exigido una doble dosis de cicuta. Sócrates nunca escribió nada y, a pesar de haber tenido numerosos seguidores, nunca creó una escuela filosófica. A los coaches se les olvida, más bien, ni siquiera saben que, la filosofía Socrática buscaba la moralidad y la justicia en todas las cosas y criticaba severamente el "enciclopedismo" de los sofistas. ¿Les suena a lo que hoy hacen? ¿Desean un referente histórico? El coaching tiene como verdaderas figuras prominentes a Antifón, Lisias, Isócrates y Demóstenes, esos que enseñaban a la élite a través de la oratoria y la retórica callejera, encandilando a ciudadanos.
¿Insisten en el coach Sócrates? De acuerdo, Sócrates fue el primer Coach. Cierto, vagaba por la polis ateniense y nunca escribió nada. Entonces, ¿cuándo se tomarán la cicuta coaches? La merecen por intrusos, vendedores de fantasías, adoradores del esnobismo, por su promoción de un burdo individualismo, por ofertar una visión pragmatista de lo ontológico y la reproducción de la noción de un hombre como un simple instrumento. Pero sobre todo, por justificar o de plano, jamás aceptar su prostitución hacia políticas neoliberales e ideologías postmodernistas. Coaches; hablan más mierda de la que cagan; resulta insostenible su delito de usurpación de profesión e insoportable sus ínfulas de gurú, sabios de la vida y especialistas espurios del desarrollo humano.
El coaching representa el mecanismo más eficiente de adaptación social. Su popularidad contrasta ante la nula reacción de los profesionales de la salud mental y, tal indiferencia colegiada parece confirmar que a la Psicología y a la mayoría de los Psicólogos, les interesa muy poco, el cuestionamiento filosófico de la propia disciplina y la defensa de nuestra ciencia por parte de simuladores. ¿Le nombraron "Coaching" ya que "Método narcicista de porras psicológicas y clichés fáciles que no solucionan nada" era demasiado largo? Un análisis racional de sus ideas fundamentalistas, demuestra que le otorgan al hombre, y por consecuencia a su proyecto mismo de "acompañamiento y crecimiento humano", un carácter meramente utilitarista e instrumental, sin preguntarse nunca a quién sirve dicha utilización.
A nivel publicitario, han sabido explotar hasta el cansancio el atractivo anglicismo, sin embargo, a nivel organizacional, educativo e incluso clínico; el coaching expresa el triunfo del pensamiento empresarial y la transformación del hombre en un simple almacenamiento práctico de recursos psíquicos al servicio del imperativo socio-económico. La Psicología, no solo resuelve problemas, además problematiza. La Psicología NO genera respuestas, plantea preguntas críticas y se opone a la reducción del pensamiento a creencias enlatadas.
@HectorCerezoH