El ajedrez electoral en el Estado de México continua con movimientos estratégicos, los meses hacia la contienda están encima y los orquestadores de los grupos políticos principales han comenzado a perfilar sus piezas tanto a nivel nacional como local.
Estaba más que claro que algunos políticos de renombre fungían como meros alfiles, esperando el momento para moverse como lo es Manuel Espino, quien fue dirigente nacional del PAN y ha ocupado puestos clave en la esfera política federal. El viernes dejó la secretaría de gobierno del municipio de Naucalpan y se va a operar a Durango, como súper delegado a trabajar para AMLO con los programas gubernamentales.
El otro alfil es Ricardo Moreno Bastida, quien prácticamente fungía como vicepresidente de Toluca pero con la figura de secretario del Ayuntamiento. Bastida tuvo un movimiento impensable al tomar posesión como Senador, tras la licencia de Higinio Martínez, pues su visión era pelear la candidatura de la alcaldía de la capital mexiquense, su imagen ya circulaba al estilo del priismo, en revistas sociales.
La licencia de Higinio Martínez, considerado el hombre más fuerte de Morena en el Edoméx, dio un mensaje fuerte para el grupo Atlacomulco, recordemos que Higinio Martínez ha declarado varias veces sus “profundas diferencias” con el gobernador Alfredo del Mazo. De hecho ha sido el único morenista de peso que ha externado públicamente estas diferencias con el mandatario mexiquense quien, como fue notorio en el segundo informe, ha sido arropado por AMLO y la alta esfera del poder federal.
En la misma esfera federal, la renuncia del priista Ernesto Nemer como secretario técnico del Consejo Político Nacional del PRI dejó claro que en la renovación de la dirigencia nacional no están contemplados los mexiquenses, el único que sobrevive es Ricardo Aguilar Castillo, secretario de Organización.
El grupo Atlacomulco debe comenzar a actuar en el Edoméx para hacer frente a esta estrategia que planea Morena, la alianza con el PAN prácticamente está sepultada luego del destape de Enrique Vargas del Villar, actual alcalde Huixquilucan, por parte del dirigente nacional Marko Cortés. Recordemos que el panista es de los pocos ediles reelectos y desde su administración anterior tiene la mirada puesta en lerdo 300.
Y mire que Enrique Vargas ha tomado muy enserio el plan de campaña tras el destape de su dirigente, es de los ediles más activos en redes sociales y con eventos. Incluso como estrategia mediática ya le acompaña a muchas actividades su esposa y presidenta del DIF, Romina Contreras, aunque no tengan que ver con temas sociales, por ejemplo las sesiones de consejo de seguridad pública. Romina Contreras también ha encabezado otros eventos de áreas ajenas al DIF como la entrega de sistemas de agua potable o de computadoras. La figura de familia cuenta.
