Los cierres de ciclos lectivos, en condiciones consideradas normales, no siempre son exitososen cuanto al logro de los aprendizajes.
Los calendarios para evaluaciones, con la presión que conlleva la entrega de boletas y certificados, según corresponda, hacen que se adelanten algunos procesos y no se alcancen a estudiar, con el debido cuidado y la amplitud adecuada, los contenidos que abarca el tercer período.
Lo antes señalado, en las circunstancias actuales se agudiza y nos lleva a valorar la importancia de, en primera instancia, reflexionar sobre los efectos que tendrá en materia educativa este receso obligado por la contingencia, particularmente en los aprendizajes de los estudiantes.
En segundo lugar, y producto de esa reflexión, tener la mayor claridad posible en lo relativo al qué hacer para contrarrestar esos efectos, en especial lo referente al rezago académico provocado por las limitaciones y las condiciones no siempre favorables con las que se trabajó, tanto por parte de los maestros como de las familias que, de manera destacada, coadyuvaron al logro de los objetivos trazados por la estrategia Aprende en casa.
En ese qué hacer coincido con lo planteado por el Secretario de Educación, Esteban Moctezuma Barragán, en cuanto a que, en la medida de lo posible, los maestros que actualmente atienden un determinado grado pasen con su grupo al siguiente. Esto es más factible en primaria, y no tanto en secundaria, donde habrá que buscar una alternativa al respecto.
También veo conveniente el establecer un período de tres semanas en agosto, para el desarrollo de un curso remedial orientado a la atención del rezago.
Esto es indispensable, pues no nos podemos engañar a nosotros mismos: autoridades, maestros, padres y alumnos estamos conscientes de que hubo deficiencias, carencias y limitaciones de diverso tipo, incluido lo técnico pedagógico, que afectaron los aprendizajes pese al esfuerzo de un buen número de maestros y padres (madres) de familia.
A nivel local, la Subsecretaría de Educación en la Región Laguna elaboró cuadernillos de apoyo para alumnos de primaria y secundaria, a fin de reforzar el trabajo en las zonas más apartadas y sectores más vulnerables.
Se está diseñando además una estrategia (de nivelación) para que en las primeras semanas del ciclo 2020-2021 secomplemente y refuerce el curso remedial de agosto.
Quedará incluido aquí el tratamiento, la atención a los aspectos socioemocionales afectados por el confinamiento. El reto es, más allá del recuento de daños, qué hacer para resarcirlos.