Desde agosto de 2015 que inició operaciones el Sistema de Transporte Masivo de Hidalgo, conocido como el Tuzobús, en la ciudad de Pachuca y la zona metropolitana, se desató la polémica entre hidalguenses de la capital y municipios aledaños por el nuevo uso del transporte público.
Y es que, para echarlo a andar se tuvieron que sacar de circulación a más de mil unidades vehiculares que brindaban el servicio de movilidad por todo el Boulevard Felipe Ángeles desde la entrada a la capital minera, hasta el Centro Histórico, así como en diversas colonias y fraccionamientos que rodean a la Bella Airosa en su extensión territorial; a la par, unidades de municipios como Mineral de la Reforma, Zempoala y San Agustín Tlaxiaca, también sufrieron modificaciones en sus rutas, lo que impactó de forma directa en la rutina diaria y costos por traslados de hidalguenses, reflejándose directa e inmediatamente en un detrimento de la calidad de vida.
Dicho factor provocó que el descontento social, inicial por el cambio, terminara en un movimiento ciudadano que marchó, protestó, peleó y consiguió durante varios meses el mantener una presión constante a las autoridades por el tema del Tuzobús, hasta que se alcanzaron los primeros acuerdos: volverían las combis o peseras a ciertas colonias de Pachuca y Mineral de la Reforma, con dirección al Centro; y se obtendrían descuentos para personas de la tercera edad o con discapacidad.
A la par, el entonces gobierno de Francisco Olvera Ruiz, tuvo que reducir el costo del servicio en más del 50% de lo estipulado desde su inicio, cuando se cobró 9 pesos por viaje inicia y 2 pesos por el complementario, dejando como hasta la fecha el precio de 8 pesos por un mismo trayecto si se hace de forma continua.
Tras más de un año de operaciones, luego de un cambio de administración gubernamental, ahora con el mandatario Omar Fayad Meneses, el Tuzobús enfrenta una nueva reconfiguración.
El propio Fayad, entonces candidato a gobernador, en abril pasado al inicio de su campaña política, fue quien mencionó que sería una de las prioridades el tema de la movilidad.
Ayer, a poco más de 100 días de haber iniciado su administración, anunció un Plan de Intervención que no es más que las modificaciones que consideran necesarias para eficientar el Tuzobús y las rutas alimentadoras.
De inicio, se dijo que se contempla el desahogo y fluidez del tránsito en las avenidas Revolución Mexicana y Benito Juárez donde por el Tuzobús se tuvo que suprimir un carril dejando una sola vía de acceso a colonias concurridas, a la sede de gobierno y a la entrada del Centro Histórico y la salida al Corredor de la Montaña.
Además, Fayad indicó que se cambiarán las unidades que actualmente son empleadas como rutas alimentadoras, para poder contar con un mayor número de vehículos que brinden el servicio de llevar a los usuarios de sus colonias a la troncal y estaciones del sistema masivo. Es un inicio, sí, y veremos con el tiempo, cuáles fueron los resultados.