En 2018 cuando recién entró a la presidencia de la República, Andrés Manuel López Obrador anunció la primera consulta popular para pedir el aval ciudadano de los 10 programas prioritarios de su administración.
A casi seis años de aquel primer ejercicio que no fue tomado en cuenta por oposición, analistas y filósofos del café, hoy se puede hacer un recuento para saber si aquello realmente era un aviso en serio de lo que tenemos.
En una boleta que emitieron en centros de votación de Morena y Servidores de la Nación, cuando todavía eran requeridos, se pidió escribir “sí” o “no” a diez rubros en los que la recién llegada 4T cimentaría las bases de su transformación.
El primer punto y más importante era “construir el Tren Maya”, seguido de “conectar por medio de un tren los océanos Pacífico y Atlántico para desarrollar el Istmo de Tehuantepec, Oaxaca, y reactivar la economía de la región”. Todos sabemos el resultado ya que ambos proyectos se llevan a cabo en la actualidad. En tercer punto se sometió a consulta: “construir la refinería en Dos Bocas, Tabasco, para producir gasolina con el petróleo extraído por Pemex”, proyecto que también se llevó a cabo.
El cuarto “plantar árboles frutales y maderables en un millón de hectáreas”, que tiempo después fue denominado Sembrando Vida; en quinto sitio, “aumentar al doble la pensión de todos los adultos mayores de 68 años y desde los 65 años en zonas indígenas”. Si bien este punto nunca llegó a consolidarse como programa, forma parte de las Pensiones del Bienestar que son universales. En el seis, “otorgar becas y capacitación laboral a 2.6 millones de jóvenes que no tienen oportunidades de estudiar ni de trabajar”. Creo que todos conocemos la respuesta.
Le siguen “becar a todos los estudiantes de escuelas públicas de nivel medio superior”, “pensionar a un millón de personas que viven con alguna discapacidad”; “garantizar atención médica y medicinas a toda la población que no cuenta con servicios de salud”, quizá el único rubro que no se cumplió a cabalidad. Y por último “proveer cobertura gratuita de Internet en carreteras, plazas públicas, centros de salud y escuelas de todo el país”, que tampoco es un secreto que no se consolidó.
Ocho de diez resultó en la calificación final de la primera consulta popular para los programas del gobierno en aquel 2018.