Que hoy será el registro de los aspirantes a dirigir la Confederación Nacional Campesina en Coahuila. Aunque pudiera haber sorpresas, se anticipa que solo habrá una candidatura, la del sampetrino, ex diputado federal, Jesús de la Rosa Godoy, por la simple y sencilla razón de que los líderes de los 38 comités municipales en la entidad firmaron un documento de apoyo a De la Rosa. El viernes se emitirá el dictamen correspondiente de aceptación o rechazo de los registros, por parte del delegado Ricardo Delgado y el 25 de octubre, de acuerdo con las bases de la convocatoria, serán las elecciones o la ratificación del candidato de unidad, en su caso.
Previamente, por regiones, se renovaron los comités municipales, en los que Delgado se topó con algunas dificultades que finalmente sorteó. El maderense José Álvarez se quedó con las ganas de ser por lo menos interino, mientras que el saliente líder estatal Natividad Navarro tuvo una gestión con más pena que gloria, viendo por sus intereses personales antes que por la menguada central campesina.
Que quien también empieza a hacer un poco de ruido y declarando a los cuatro vientos que lo han olvidado, es el ex candidato a la alcaldía de Gómez Palacio Raúl Meraz, quien se ha dejado ver en más de una ocasión despotricando contra sus jefes por no regresarlo aún a la subsecretaría de gobierno.
Que en los pasillos del poder corre el chisme como reguero de pólvora: Meraz está tocando todas las puertas, marcando todos los números y hasta mandando señales de humo para que lo regresen a la Subsecretaría de Gobierno. El problema es que ahí ya no lo quieren. Entonces, aferrado ahora pide a la Subsecretaría de Educación, aprovechando que Ulises Adame ha cometido errores como estudiante en examen sorpresa y ya siente la guillotina.
Pero Ulises, testarudo como buen político de cepa, amenaza que si lo quitan de Educación, lo manden derechito a la dirigencia del PRI en Gómez. Y qué coincidencia: ¡eso mismo quieren algunos! El problema es que, en este juego de sillas, siempre falta una silla y sobra un político.
Los rumores dicen que Meraz podría aterrizar en la Subsecretaría de Bienestar, que Ulises se quedaría donde está (aunque patalee) y que la Subsecretaría de Gobierno se ha convertido en todo un misterio, como esos expedientes clasificados que nadie quiere abrir porque seguro sale más polvo que soluciones.
Que ayer en Gómez Palacio desayunaron en un restaurante de la Aldama los notarios públicos de Durango que buscan renovar el Colegio en el estado. Entre los notarios hay un aspirante único a la presidencia del organismo es Juan Carlos Parral Pérez notario público número 11. La idea es nutrir de sangre nueva a esta institución que en la entidad goza de prestigio.