Que la justicia por propia mano sigue siendo un dolor de cabeza, y en Hidalgo la cosa no es diferente, pues se nos recuerda que el estado está entre los campeones nacionales de linchamientos, junto a Puebla y el Estado de México. No es poca cosa, y el presidente del Congreso local, Andrés Velázquez Vázquez, ya puso el dedo en la llaga.
Que Velázquez, emanado de Morena, nos recordó algo fundamental: “Nadie está por encima de la ley”. ¡Y vaya que tiene razón! Porque un linchamiento, además de ser una barbaridad, suele llevar de la mano otros delitos graves como lesiones y homicidio. La cosa es que, aunque suena lógico que se castigue, hasta la fecha no hay una iniciativa viva en comisiones del Congreso para tipificar este delito en el Código Penal de Hidalgo. Este Pájaro Carpintero se pregunta ¿Para cuándo?
Que el diputado subrayó que cuando la gente toma la justicia por su mano, no solo se incurre en un delito, sino que se corre el riesgo de linchar a personas inocentes. “Incluso han ocurrido equivocaciones lamentables”, dice. Y sí, tiene toda la razón. Luego entonces valdría la pena dada la incidencia retomar este asunto y legislar sobre ello ¿el resto de los legisladores no le van a entrar?
Que al final, la conclusión es la de siempre: hay que fortalecer las instituciones de impartición de justicia y coordinar mejor a las policías municipales, que muchas veces ni con elementos suficientes cuentan. La pregunta que queda flotando en el aire es: si ya se sabe el diagnóstico y se tienen antecedentes de iniciativas para castigar los linchamientos, ¿Qué falta para que en Hidalgo la ley sea realmente la que rija, y no la turba encendida? Ojalá y no se quiera tapar el pozo cuando ya se haya ahogado el niño.
Que en el Instituto Estatal Electoral de Hidalgo (IEEH) los consejeros Christian Uziel García Reyes, Miriam Saray Pacheco Martínez y Laura Aracely Lozada Nájera dirán adiós al organismo y la cuestión es si ya andarán buscando perfiles para sustituirlos. Se van sí, pero parece que no les corre prisa por informar sobre su trabajo pues de todo aseguran hay constancia… flojera o desinterés no lo sabremos.