Es momento para que los dirigentes de los partidos políticos en Jalisco contraten los servicios de un buen médico traumatólogo. Esto porque como se avizoran los tiempos de 2023, habrá fracturas importante en por lo menos dos partidos políticos locales (por lo menos, insistimos). Estas fracturas serán invariablemente por el proceso de selección de sus candidatos (o candidatas) a gobernador, pues hay grupos o tribus encontradas en disputa por el mismo lugar en las boletas, y por lo que vemos no hay muchas ganas de ceder ante los rivales. Es cierto que son asuntos de cada tres o seis años, pero este 2023 parece más complicado para los institutos políticos.
Por cierto, las negociaciones para mantener un frente unido en Jalisco entre PAN, PRI y PRD con miras a las elecciones de 2024 se mantienen. Todavía no hay acuerdos sobre cómo podría ser la configuración electoral, pero una versión señala que el Tricolor podría ser quien encabece la campaña a gobernador (mejor dicho, a gobernadora, porque Laura Haro es la más aventajada), mientras que el PAN pondría candidato o candidata a la Presidencia. Inicial de Guadalajara. Todo está prendido aun con alfileres, pero de que se sigue negociando, se sigue.
El fallecimiento del papa Benedicto XVI, ocurrido el sábado pasado, trajo recuerdos a buena parte de la comunidad católica jalisciense, pues el prelado visitó Guadalajara en mayo de 1996 para participar en el segundo encuentro de presidentes de Comisiones Doctrinales de las Conferencias Episcopales de América Latina. El entonces presidente de la Comisión de la Doctrina de la Fe se alojó en la casa de los sacerdotes en el templo de La Madre de Dios, en la Colonia Providencia. También presidió una comida a la que fue invitado en Chapala. Años más tarde visitaría México como Papa, pero sin pasar por Jalisco.
La falta de un buen café hizo que el viernes pasado escribiéramos en este espacio que El Rey Pelé se había alojado en las Suites Caribe en Guadalajara durante el Mundial México 70, los cual es incorrecto. El error fue haber ubicado las suites donde está el hotel Posada 70, cuando en realidad estaban unos metros más adelante en López Mateos, donde hoy se erige el hotel Guadalajara Plaza.
