Obvio que la nota de la semana no puede ser otra más que esta, ya de manera oficial salió a la luz de que Hidalgo anda en la terna de quedarse con la armadora de autos eléctricos que Tesla quiere colocar en nuestro país.
El tema no es nuevo, lleva ya su buen rato, empezó allá en Nuevo León cuando Samuel García dijo que la marca se establecería en sus terruños y empezó con todo la negociación, sin embargo, se les está yendo abajo porque no se cubren los requisitos de electricidad y si no es con CFE ya sabe que no es con nadie más, por eso ni tardos ni perezosos los del gobierno federal empezaron a mover sus hilos y el carnal Marcelo Ebrard ya hizo sus declaraciones de que la planta se viene a México sí o sí.
Como le mencioné, la terna más fuerte es Nuevo León, Estado de México e Hidalgo, digo la más fuerte porque el alcalde de Zapopan en Jalisco también anda haciendo su luchita y ya levantó la mano para decir que por allá les darían hartas facilidades.
El tema de las armadoras siempre ha sido político, recuerde cuando la BMW estaba por establecerse en nuestro estado, pero al final los negociadores de Paco Olvera no supieron o no quisieron hacer el cierre y los alemanes terminaron por irse a San Luis Potosí.
El rubro automotriz es un gran negocio y potencializa las zonas donde se establece, por eso ahora AMLO está metiendo las manos en este tema, quiere que se quede ya sea en el Estado de México en el T-Mex Park que será el hub logístico más grande de América Latina, o bien en unos terrenos ahí por Tizayuca, la razón no es otra más que seguirle dando vida al AIFA.
Que ya los que saben de exportación de autos están diciendo que nada tiene que ver el Felipe Ángeles, a menos que sea para importar o exportar autopartes, ya que el sacar los autos del país donde son fabricados siempre será más barato (y por mucho) hacerlo por carretera, por tren o por mar, así se ha hecho y se hace en todas partes del mundo, volarlos encarecería repito, su precio de venta final.
David Aarón Cárdenas
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