“Los hechos son obstinados, y por más que se intente ocultarlos acaban abriéndose paso y ocupando su lugar en nuestro mapa de la realidad”. Carlo Frabetti
La oposición en México a la cuarta transformación y en especial al presidente Andrés Manuel López Obrador está desesperada y enloquecida.
No encuentran como descarrilar la consolidación de un movimiento que tiene opción preferencial por los pobres, sin caer en los campos de la teología de la liberación que denunciaba la opresión y la desigualdad social en los ochentas en América Latina.
El asesinato de Monseñor Romero en el Salvador, por mencionar un ejemplo, fue un magnicidio que cimbró a todo el Continente Americano para ponerle un alto a la derecha conservadora.
Un basta a la violación a los derechos humanos.
Desafortunadamente la opción preferencial por los pobres sigue estando rechazada por los gobiernos de derecha.
Esta población es una carga y no, la oportunidad de una política social para mejorar su calidad de vida. Populismo le llaman ellos.
Estúpidamente dicen que el pobre es pobre porque quiere.
Y en ese sentido la oposición con miras a las elecciones del próximo junio (que por cierto aun no comienzan), esta –insisto-, desesperada y enloquecida.
Cualquier espacio en la arena política que se refiera a AMLO, Morena o la 4T buscan minarlo con desinformación, calumnia, engaño y sobre todo con mentiras.
Añoran regresar al poder. Se han quedado sentadas como la “Loca” del muelle de San Blas.
Pero hay que recordar quién fue aquella mujer que se quedó esperando en el Muelle Nayarita:
Cuenta la historia que en San Blas, Nayarit, una mujer de nombre Rebeca Méndez se comprometió con un joven pescador el cual días previos a su enlace matrimonial, salió a pescar.
Ella acudió a despedirlo pero desestimó que nunca regresaría. El mar lo desapareció como a Alfonsina y el mar. La prometida dicen acudía esperando su regreso con su vestido de novia.
El pescador jamás volvió. Rebeca se quedó esperando en el Muelle de San Blas…
Esta historia más o menos es la que se conoce. Historia que el grupo Maná plasmó en el álbum: “Sueños líquidos con el nombre En el Muelle de San Blas en 1998.
Estoy convencido que tener conciencia de la realidad y darse cuenta que no hay regreso o viraje es muy psicologizante.
Y esto lo he aprendido de mi psicoanalista. Cuando los hechos son obstinados y a falta de conciencia está la negación, nos colocamos ante patologías psíquicas en el menor de los casos.
En el extremo ante problemas psiquiátricos.
La oposición está enloquecida por los hechos presentes con los resultados de gobierno que perfilan a la candidata de Morena Claudia Sheinbaum como la próxima presidenta de México.
Los deseos volitivos de ver a Morena fuera del gobierno a la oposición los retuerce como una piara de locos.
Han llegado al paroxismo.
No aceptan que Morena está más fuerte que nunca por una razón incuestionable:
La revolución de las conciencias entre la mayoría de los mexicanos, simpatizantes y no se diga de su militancia que respalda al movimiento no desde la locura, sino desde la razón y la conciencia social.
Ante la desesperación a la oposición no le queda más que la construcción de narrativas difamatorias que no transitan al campo democrático, sino a la polarización política donde todos estamos inmersos si de gusto por la política se trata.
Y no es para menos pues los cambios de la 4T han sido para la oligarquía (esa que se sintió dueña de México), traumáticos e insufribles.
Ante eso, el discurso de odio y violencia.
Pero como diría la dramaturga y escritora Sabina Berman: “Lo que no pueden ganar en las urnas, quieren ganarlo en la narrativa, aún si se llevan al país entre patas”.
Continuará…
@cuauhtecarmona