Comprensión, aceptación y perdón fueron las palabras clave que el cantautor Alberto Aguilera/Juan Gabriel utilizó para hablar sobre el amor durante una entrevista para la televisión española en 2001.
—¿De qué nace el amor? — Le cuestionó el periodista Jesús Quintero, conductor del programa “El vagamundo”.
—Nace de lo que usted siente por la otra persona, siempre y cuando la comprenda, la acepte y la perdone. — Dijo, aquella ocasión, el divo de Juárez. (YouTube)
La sencillez acompañó a Alberto Aguilera/Juan Gabriel durante esa exitosa carrera musical que se sintetiza en de más de mil 800 composiciones y 61 proyectos discográficos. Y digo sencillez porque rompió el culto a la palabra y, sin mayor pretensión, puso letra y música a las geografías personales del alma, a lo intrincado del amor. “En una canción se desahogan las vivencias”, ya le advertía -en 1985- al periodista Ricardo Rocha.
En la construcción de la canción popular, “cuando estoy enamorado todo marcha bien y me da mucha flojera escribir. Porque me la paso muy rico. Los problemas vienen cuando llega la separación”, le expresa al periodista mexicano. (YouTube)
A tres años de su partida JG se erige como patrimonio e identidad. Sus canciones continúan escuchándose, sigue vigente y sigue conmoviendo. Porque retrata y refleja en las cuitas cotidianas del corazón, cuando los amores llegan al límite de las despedidas y no hay poder humano que los reconstituya; cuando en la adversidad de los sentimientos, ya no cabe la compresión y la aceptación, menos aún el perdón.
En esa hora de la visceralidad por la ausencia o en el reencuentro de los antiguos afectos producto de la memoria pertinaz, es cuando se requieren las canciones del mismísimo divo.
Sí, es justo en el instante cuando se encienden las alertas ante el olvido: ya lo sé que tú te vas. O cuando, en la madrugada, se predica (y se hasta comparte la ubicación por whatsapp) por eso aún estoy en el lugar de siempre...
Pero con Juan Gabriel hay para todos los estados de ánimo. Incluso hasta para bailar.
Vienes o voy.