Está claro y lo confirman las encuestas que es la inseguridad lo que más preocupa a los ciudadanos. La delincuencia ha vuelto a cambiar negocios y métodos —ahora son la extorsión y el territorio, por ejemplo— y sigue aterrorizando a poblaciones.
Lo saben los aspirantes.
Adán Augusto López Hernández dijo en Michoacán: “Y aquí se los digo, le vamos a ganar la batalla a la inseguridad. Y desde aquí lo ofrezco, debe de haber Guardia Nacional en funciones de policía municipal y tiene que ser con formación militar. Por eso, la Guardia Nacional va a hacer funciones de policía municipal, con formación militar y va a depender de la Secretaría de la Defensa y aquí también les digo, ha iniciado la transformación de Michoacán”.
Ni siquiera nos metamos al lío legal que eso que dice Adán significa en términos de federalización. Más militares comandados desde la Ciudad de México, es decir, más de lo mismo que ya vimos lo bien que ha funcionado en los últimos quince años.
Marcelo Ebrard presentó el programa Ángel. Básicamente llenar de cámaras las calles, las carreteras, los uniformes de policías, hartos drones y donde se pueda. Luego utilizar inteligencia artificial, unir todas las cámaras y tener toda, toda la información de todos. Ese, por cierto, era el sueño nunca logrado de García Luna con su búnker.
Es más, dijo Marcelo que hasta por la manera de caminar van a saber si usted es delincuente. Por cierto, eso que se llama Gait Recognition fue desarrollado y es usado desde hace un par de años en China. ¿Necesito decir más?
Por lo pronto, aprendamos a caminar como no delincuentes, no sea que nos detengan.
Creo que Marcelo y su equipo han visto demasiadas series británicas donde las policías tienen cámaras en todas partes.
Pequeño detalle: alguien tiene que ver esas cámaras y actuar con legalidad y eficiencia. Y tiene que haber un sistema de impartición de justicia eficaz que controle lo que ahí se recolecta y haga valer los derechos de los ciudadanos vigilados. En fin. Una ocurrencia; pero al menos una propuesta y menos sonrisas.
Claudia tiene un problema. Presumir sus indudables logros en seguridad en la ciudad implica presumir a una policía civil, con un mando civil. Aquí, en la capital, no hay militares. Así que por lo pronto, el silencio, no se vaya enojar YSQ.