Alito se la pasa corriendo, dice y dice cosas, da entrevistas, se sube a aviones, denuncia…No para ese Alito.
Y no para porque cada semana hay un audio nuevo, cada vez peores, otra propiedad inexplicable, otra barbaridad y se le acumulan las denuncias. Eso sí, dice que no se va del PRI aunque se lo pidan los ex presidentes o correligionarios u otros partidos… él no se va de su puesto.
Vaya usted a saber quién asesora a Alejandro Moreno en estos momentos o si fue ocurrencia suya, pero su última —¿o única?— propuesta de política pública fue esa barbaridad de que los mexicanos tuvieran acceso a armas para agarrarse a balazos contra aquellos que quisieran delinquir contra ellos.
Por eso es por lo que creo que, en lugar de irse a Ginebra, Alito debería ir a Chicago y platicar con las autoridades policiacas y de justicia de aquella ciudad.
Como todos sabemos, el 4 de julio sucedió una más de esas tragedias que en los últimos años se acumulan en EU. Un hombre disparó sobre una multitud y en ese caso asesinó a ocho personas e hirió a decenas.
Illinois tiene una de las leyes de compra y posesión de armas más estrictas de Estados Unidos (ojo, Alito).
De Robert Crimo, el hombre que disparó y ya confesó, sabemos lo siguiente:
En abril de 2019 alguien llamó a la policía para decir que había intentado suicidarse, las autoridades y el departamento de salud determinaron que no necesitaba más que el cuidado de sus padres. Unos meses después, los oficiales le incautaron varios cuchillos después de que un pariente de Crimo informara que lo había escuchado decir que planeaba “matar a todos”.
Meses después de esos dos encuentros, el padre de Crimo patrocinó la solicitud de su hijo para un permiso estatal que se requiere para poseer armas. Crimo fue aprobado y compró legalmente al menos dos rifles.
Ambos los tenía el día de la matanza. El utilizado fue un rifle semiautomático Smith & Wesson que había comprado en 2020, un año después de la incautación de los cuchillos. En su coche encontraron el otro. Él mismo ha confesado que después de disparar en Highland Park se dirigía a Madison, Wisconsin, para atacar otra celebración de la Independencia, pero se arrepintió.
Pues sí, las armas matan. Y no hay legislación que lo contenga cuando abundan. Ojo, Alito, después de España y Ginebra pásate por Chicago...
Carlos Puig
@puigcarlos