Hace más de dos años, la periodista de Proceso, Beatriz Pereyra, comenzó a publicar con datos y documentos en la mano la existencia de una red de corrupción dentro de la Conade durante este sexenio ligada directamente con el fideicomiso Fondo para el Deporte de Alto Rendimiento (Fodepar). Sí, ese que prepara a nuestros atletas para ir a los Juegos Olímpicos.
Una investigación de la Secretaría de la Función Pública (SFP) encontró un grupo de empresas factureras que, de acuerdo con lo revelado por Beatriz, “reportan ingresos, pero no utilidades; tampoco pagan impuestos, simulan operaciones financieras y están radicadas en el estado de Campeche”.
Mucho se ha hablado de los pobres resultados en medallas de nuestra delegación en los Juegos Olímpicos que acaban de concluir y muchos andan buscando responsables. Pienso que el desastre de nuestro deporte olímpico viene de atrás, de muchas corruptelas, dinero tirado a la basura, federaciones que se crean para lucrar o hacer política.
Pero en todo esto y todos estos años hay responsabilidades concretas. Otra cita de uno de los reportajes: Catering Housekeeping, Hospitality and Feeding Services es la empresa favorita que un grupo de servidores públicos de la Conade ha utilizado para sacar el dinero del Fodepar con la ayuda de federaciones deportivas, entrenadores, personas que se han hecho pasar por entrenadores y de alrededor de 12 metodólogos y analistas técnicos. (...) La auditoría 12/2019 del Órgano Interno de Control de la SFP —realizada por órdenes del presidente Andrés Manuel López Obrador— confirmó lo reportado por este semanario y puso al descubierto que existe un daño patrimonial de 50.8 millones de pesos al Fodepar solo durante el primer semestre de 2019 por desvío de recursos y porque parte de ese dinero fue comprobado con documentación ´falsa, alterada, apócrifa y carente de validez fiscal´”.
Como suele suceder, se impusieron algunas sanciones administrativas a funcionarios menores… pero la SFP había preparado también una denuncia penal —porque muchos de los actos eran delitos penales hasta que alguien la frenó. Con Ana Gabriela, no.
Y la denuncia detenida sigue… será por eso por lo que Ana Gabriela anda tan despreocupada. Más allá de medallas y esas tonterías.
@puigcarlos
