Una carcajada reduce la tensión física y relaja los músculos por hasta 45 minutos. Una persona que ríe constantemente, puede vivir hasta cuatro años y medio más y tener 40 por ciento menos problemas vasculares (University of St. Agustine, 11/2019 y Clarín, 08/05/15).
Sonreír y reírse no solo hace que las personas sean percibidas como más felices, atractivas y seguras, sino que también beneficia a nuestro cuerpo y mente (Healthy Magazine, 20/03/18).
Primero, bienestar mental
Además de ayudarnos a liberar el estrés, una sonrisa provoca que el cuerpo aumente sus niveles de dopamina, endorfinas y serotonina, es decir, las hormonas de la felicidad. La primera, se relaciona con el amor; las segundas, son un analgésico natural que calma el dolor y, la tercera, está vinculada con el control de las emociones y el estado de ánimo (AANMC, 09/02/20 y BBC, 21/03/17).
Al reír, dejamos de liberar cortisol, una de las hormonas ocasionadas por el estrés, que hace que bajen nuestras defensas y que nos enfermemos más. Con la risa se fortalece el sistema inmunológico porque mejora la efectividad de las células T y producimos más anticuerpos (Time, 19/11/14 y Behavioral Health Clinic, 04/01/17).
Segundo, bienestar físico
La risa mejora la salud cardiovascular, hace que llegue más oxígeno a los pulmones y que estos se estimulen porque mueven el doble de aire de lo normal. Gracias a las endorfinas, también baja la presión arterial.
Las mujeres con un fuerte sentido del humor tienen 83 por ciento menos riesgo de fallecer por una infección. En el caso de los hombres, tienen 74 menos posibilidades de morir por alguna infección (UWA, 06/06/19).
Reír hace que nos veamos más jóvenes porque se tonifican los músculos de la cara y ayuda a que la columna, los tendones y las cervicales se estiren. Cuando nos reímos, se activan 400 músculos del rostro y del abdomen (Uno TV, 07/06/17).
Tercero, otros beneficios
La risa es más contagiosa que un bostezo o un estornudo, lo que puede ocasionar un efecto positivo en las personas que nos rodean. Nuestro cerebro no solo reacciona cuando alguien sonríe sino que también nos premia cuando nosotros lo hacemos (SCL Health).
Quienes sonríen constantemente son más eficientes en el trabajo, se vuelven más creativas y productivas. Igualmente, sirve para mejorar el ambiente de trabajo.
Cuando sonreímos los demás nos perciben de manera distinta porque ayuda a que nos vean como personas más accesibles, agradables y corteses (Psychology Today, 25/05/16).
Una sonrisa es contagiosa y de manera natural nos invita a sonreír de regreso, así que tratemos de reír lo más posible porque repercute en nuestra calidad de vida, en la forma en la que percibimos el mundo y cómo nos perciben los demás. _