“Estamos como estamos porque somos como somos”, decía ayer en su discurso Carlos Salazar, presidente del Consejo Coordinador Empresarial (CEE), México es “un país lleno de ilusiones por construir un lugar de paz y prosperidad que aún no logramos alcanzar”.
Fue el lanzamiento de un decálogo de compromisos bautizado “Dimensión Social de las Empresas”.
En primera fila estaba buena parte del establishment nacional: Carlos Slim, Antonio del Valle, Blanca Treviño, Daniel Servitje y los líderes de las principales cámaras empresariales. En total son 150 las organizaciones que juntas representan a un millón de empresas.
“Debemos reconocer que enfrentamos un problema importante de imagen y percepción social”, abundó Salazar, quien puso sobre la mesa 10 principios resumidos en: crear empleo formal, desarrollo y crecimiento para sus empleados; modernizar la cultura empresarial; construir relaciones de confianza y credibilidad con la sociedad; que las grandes empresas apoyen a las Pymes; demostrar obligación moral y participar en el desarrollo de comunidades; asumir y promover la inclusión, la diversidad y el respeto a los derechos humanos; privilegiar la sustentabilidad, apostar a las soluciones digitales respetando la privacidad e impulsar una relación propositiva con el gobierno.
“Las empresas no crecen en sociedades que no prosperan. Así de simple”, me comenta desde el auditorio Martha Herrera, directora global de negocio responsable de Cemex. Ella lidera una de las siete ‘áreas de enfoque’ en las que el CCE ha dividido esta iniciativa, que cuenta además con Comisiones de Trabajo. Ella es la Consejera del Área de Enfoque de Democracia y Compromiso Social y estará a cargo de la agenda de inclusión, derechos humanos y participación ciudadana.
“Pasemos de la reflexión a los hechos”, dijo Salazar al terminar su discurso.
Porque, efectivamente, suenan a acciones muy ciudadanas y necesarias para el país, pero ¿cómo se aplicarán y cómo se medirá el real compromiso de las empresas?
Quienes conocen de cerca al presidente del CCE coinciden en que su mayor aspiración es fortalecer el salario de bienestar y presentar un disruptivo plan de pensiones para aumentar el compromiso de los empresarios en el retiro de sus empleados.
@ba_anderson