Proxima de Alice Winotour me recordó la película Gravedad (Gravity) de Alfonso Cuarón ya que estoy convencida que uno de los motivos de su impacto se debió al hecho de que no narra las aventuras de hombres astronautas que vencen obstáculos con actos heroicos y reflexiones metafísicas sino la historia de la resistencia femenina en la soledad y el aislamiento en el espacio sideral. No sé si la realizadora francesa Alice Winocour y su coguionista Jean-Stéfane Bron se inspiraron en Gravity pero me parece emocionante que se preguntaron cómo sería la preparación física, mental y emocional de una mujer que ha decidido estudiar la carrera de astronauta para arriesgarse a conocer el espacio. Proxima no observa el comportamiento de la protagonista en el espacio, Describe a detalle las condiciones y obstáculos en la tierra que marcan la lucha de una mujer que ha decidido realizar su sueño, profesional y emocional.
Sarah (Eva Green) estaba atraída por el espacio desde que era niña, estudió para astronauta en la Agencia Espacial Europea ESA, se casó con un investigador astrofísico y le puso el nombre de Stella (Estrella) a su hija (Zélie Boulant). La película empieza con la voz de Sarah que le describe a su hija cómo es el espacio. Después la observamos ejecutar en un simulador de una nave un complicado protocolo de emergencia y aprender a moverse con los guantes de un traje espacial. Sarah ha sido seleccionada para formar parte de una misión espacial internacional y el proceso de preparación para el viaje forman uno de los hilos narrativos del filme. El otro muestra la planeación personal y familiar para la ausencia de un año: ¿Dónde y a quién encargará a su hija ya que está separada de su ex pareja? ¿Cómo enfrentará su condición biológica, qué objetos personales llevará consigo y cómo lidiará con la angustia de despegarse de su hija y arriesgarse a una aventura de la que quizás no regresará?
Mientras que las mujeres de la agencia espacial la alientan, los hombres la ven con desconfianza. El líder del equipo astronauta Mike (Matt Dillon), por ejemplo, se dice feliz de contar con una colega francesa ya que tienen fama de buenas cocineras. Otro obstáculo es el carácter demandante de su hija Stella que responde con celos a los planes profesionales de su madre y la idea de tener que separarse de ella. El drama familiar y los sentimientos de culpa ponen a prueba la fortaleza emocional de Sarah.
La tensión entre la tierra y el espacio, los roles femeninos y las exigencias masculinas, los sueños astrales y la realidad terrenal, la libertad y la dependencia, mantienen a Sarah - y al espectador - en constante suspenso. Alice Winocour y la actriz Eva Green no construyen una mujer-heroína. Su Sarah es frágil, vulnerable y contradictoria, rompe reglas, comete errores y sigue sus instintos femeninos. El sueño del espacio y el amor por su hija son polos opuestos que su fortaleza femenina tiene que unir.
Annemarie Meier
