Nefasta, insufrible, maldita. Así es “Rise of The Pink Ladies” de Paramount+, un verdadero insulto para “Vaselina”. ¡Y mire que “Grease 2” era mala!
¿Qué es “Rise of The Pink Ladies”? La típica serie de “rating” fácil que aparece y desaparece en el mercado de las plataformas apelando a un clásico de la cultura popular hollywoodense.
El problema es que aquí, como en la mayoría de estos actos de oportunismo, como que alguien dijo: “Esto ya no aplica en términos ideológicos. Vamos a actualizarla”. Y el resultado es una desgracia.
Sí se acuerda usted de “Vaselina”, ¿verdad? ¿Cuántas versiones ha visto además de la película? ¿Con qué reparto? ¿En qué momento? ¿En qué lugares?
Pues ahora resulta que en los Estados Unidos de los años 50 no había racismo, homofobia y que todo era de una inclusión y de una multiculturalidad vanguardista.
Además de porristas mujeres, había porristas gay. El líder de los T-Birds era una mujer. Los blancos tenían celos de los latinos porque nuestras pieles morenas eran las que más deseaban las rubias oxigenadas.
Por supuesto que las lesbianas eran muy bien vistas y las personas asiáticas, más. Y no había redes sociales, pero ni se necesitaban porque todos estaban instalados en la “selfie” y en el “hashtag” a través de los autocinemas y de los teléfonos públicos.
No, pero espérese. Todavía ni empiezo porque, claro, en aquellos tiempos todos hablaban de sexo como si se tratara de hamburguesas y estaban en lucha permanente contra el “bullying”.
“Rise of The Pink Ladies” es tan mala, tan mala, pero tan mala que en la traducción de los créditos finales, el color “pink” (el rosa) lo tradujeron como “rojo”.
Ahora las chicas rosas son chicas rojas. Putas, les dirían en mi rancho.
¡Me muero! Se supone que esto es una precuela de “Grease” pero no hay manera de verla y de no rechazarla.
Yo le debo confesar que casi me tuve que amarrar a la silla para poder ver los pocos capítulos que han subido sin cambiarle a otra plataforma o sin apagar mi Smart TV.
¿Pero sabe qué es lo más terrible de todo? La ignorancia frente a la corrección política.
Para ser incluyente, feminista, “gay friendly” y todas estas cosas, hay que serlo de verdad. Si no, el mensaje que se manda es peor a la discriminación, la misoginia y la homofobia.
¿Por qué? Porque convierte las grandes causas sociales en moneda de cambio, en un negocio, en algo que no se hace por conveniencia. Es promoción de la doble moral.
Si los responsables de “El ascenso de las chicas rojas” se hubieran tomado la molestia de analizar “Vaselina”, hubieran descubierto que estaban ante un musical que se adelantó a su época en dos sentidos:
Primero, porque apelaba a la nostalgia de los años 50, en los años 70, cuando nadie utilizaba ese recurso.
Y segundo, porque era, de origen, una obra sobre inclusión, sobre feminismo y sobre muchos otros valores. No había necesidad de componerla.
Esto no es “Riverdale”, “Merlina” ni “Chilling Adventures of Sabrina”. Es “Grease” y si se iba a hacer una precuela, el camino era otro incluso en la muy mediocre parte musical.
Qué pena, de veras, lo que está pasando aquí. ¿O usted qué opina? ¿A usted sí le está gustando mucho? ¿Considera que es una serie que pasará a la historia por su alto impacto y calidad?
Por favor véala y me comenta. Yo no puedo con ella. Se me hace nefasta, insufrible, maldita. La odio.