A veces me da miedo que haya gente engañando a las multitudes en las redes sociales con cuentos como que Hitler no era tan malo.
Por eso felicito a History por seguir siendo un canal fiel a su tema, la historia, con producciones como “Submarinos perdidos de la Segunda Guerra Mundial” y “El poder de Hitler”.
Sí, yo sé que muchas personas piensan que por tratarse de televisión de paga si no están amarradas a la pantalla, como antes, ya no pueden ver estas maravillas.
Pero no es cierto. History tiene una plataforma y muchas cableras ofrecen el servicio de “retroceder en el tiempo”. Esto no es un anuncio. Investigue. Le conviene.
“Submarinos perdidos de la Segunda Guerra Mundial” es una serie documental, mil veces más emocionante que muchos “reality shows” de aventuras, donde el hijo de un investigador va en busca de siete submarinos nazis y ni sabe usted lo que pasa.
“El poder de Hitler” es una joya que analiza a este personaje con la mirada de hoy. La nota es que uno puede vincular lo que hacía con lo que están haciendo muchos políticos. No se pierda nada de esto.
NOSTALGIA
Si usted fue niña, niño o adolescente en los años 90, le recomiendo una serie muy bonita de Prime Video.
Se llama “Nadie nos va a extrañar” (¡Qué feo nombre!), cuenta cómo era la vida de los chicos hace 30 años, es medio social y funciona muy bien porque sus responsables se esmeraron en retacar aquello de referencias culturales y de elementos nostálgicos.
Desde lo que es propiamente una producción de época hasta la música y las imágenes de archivo.
A mí lo que me gusta es que va exactamente en el mismo sentido que los grandes unitarios del momento, como “La rosa de Guadalupe” y “Como dice el dicho”, sólo que como va etiquetada como serie y viaja en “streaming”, las multitudes en lugar de atacarla, la elogian.
¡Cada quién sus prejuicios! Pero de que vale la pena, vale la pena y el reparto está lleno lo mismo de nuevos valores que de luminarias como Anabel Ferreira, Gaby Rivero, Montserrat Marañón, Ernesto Laguardia, Mauricio Pimentel, Moisés Arizmendi y Miguel Burra.
Si usted fue niña, niño o adolescente en los años 90, búsquela ya.
INCREÍBLE
Takashi Sano es un director muy querido e importante en el mundo de la animación japonesa (anime) y, como muchos saben, es el fan más fan de ese gran clásico del “Adult Swim” de Cartoon Network titulado “Rick y Morty”.
El señor no está nada perdido. “Rick y Morty” es lo máximo de las caricaturas para adultos, una obra occidental que se adelantó a su época (2013) donde muchas y muchos hemos encontrado diversión y placer.
Sano ya se había acercado a este título. ¡Pero qué cree! Lo acaba de hacer en anime. No en corto. No en película. ¡En serie! Y el resultado es, definitivamente, de lo mejor del año.
“Rick y Morty: el anime” pasará a la historia como una de las más perfectas fusiones de lo mejor de oriente con lo mejor de occidente. Imperdible es poco.
Está toda la fuerza original de esta obra, pero potenciada con los valores y los recursos de las mejores animaciones de Japón.
Quiero que me jure que no se va a perder este experiencia, que desde el 16 de agosto sube a un ritmo de un episodio por semana, a MAX. Estamos ante algo inmenso. ¡Felicidades!
