México postuló al doctor Juan Manuel Gómez Robledo Verduzco como candidato para ocupar una silla en la Corte Internacional de Justicia (CIJ). Su capacidad jamás estuvo en duda. Sin embargo, los señalamientos al proceso con el que se dio su nominación deben ser tomados en cuenta y corregirse.
Expertos en derecho internacional y el propio consultor jurídico de la Secretaría de Relaciones Exteriores, Alejandro Celorio, me han hecho ver que el nominado tiene un extraordinario perfil y cuenta con altas posibilidades de convertirse en juez de la CIJ.
Ante este escenario, vaya exhibida en la ONU y con el resto de aspirantes a jueces la que les puso el doctor Juan de Dios Gutiérrez Baylón tras la negativa de la cancillería a tan siquiera valorar su trayectoria antes de enviar al candidato mexicano. Solicitud que escaló ante la justicia para obtener una suspensión de un juez con la que buscó ser tomado en cuenta en el proceso.
Con altas capacidades para competir por el puesto, incluso citado en relatorías elaboradas por el ahora nominado, argumentó la supuesta falta de transparencia y pulcritud del proceso.
Para quienes conocen del asunto, hay correcciones que pueden hacerse para evitar señalamientos de este tipo en el futuro.
Por ejemplo, actualizar la integración del Grupo Nacional Mexicano, encargado de valorar y postular a los candidatos, para que cuente con participación de mujeres, pues en el actual los cuatro integrantes son hombres.
También deben ponerse reglas claras para evitar posibles conflictos de interés como el que se señaló en la nominación actual, ya que uno de los integrantes, el también destacado jurista Alonso Gómez Robledo Verduzco, es hermano del postulado. La transparencia del proceso sería fundamental para conocer la injerencia que tuvo debido a que su firma está inscrita en la postulación.
Celorio me aseguró que el proceso fue el adecuado, que no hubo conflicto de interés y que el nominado es el más capaz para llegar a la CIJ.
El viernes, la cancillería publicó un video en el que su candidato, Juan Manuel Gómez Robledo Verduzco, expone en español, francés e inglés, estos dos últimos los idiomas oficiales de la CIJ, detalles de su trayectoria profesional de más de 40 años y dice que espera contar con el apoyo de la Asamblea General y el Consejo de Seguridad de la ONU para lograrlo. Ahí su carnal no vota.