Uno de los mayores predictores de una vida larga, feliz y llena de salud es la calidad de relaciones que tenemos. Somos una mezcla de la gente que nos rodea de forma cotidiana pues sus pensamientos, acciones y actitudes se impregnan en nosotros y después condicionan nuestro andar por la vida, ya sea de manera positiva o negativa. Lo anterior me ha llevado a reflexionar sobre qué tan seguido evaluamos la calidad de estos vínculos y, recordé que hace años leí una forma de hacerlo contestando dos sencillas preguntas basadas en la metáfora de 2 cervezas y 1 cachorro creada por Ross McCammon. Él te invita a elegir una persona y contestar:
¿Me tomaría dos cervezas con esta persona?
Cuando la respuesta es sí, quiere decir que disfrutas de su convivencia y su plática. Su personalidad es afín a la tuya y con ellos el tiempo pasa ligero y relajado.
¿Le confiaría el cuidado de mi cachorro por un fin de semana?
Si la respuesta es positiva, tienes frente a ti alguien a quien consideras responsable y le confías asuntos serios y de cuidado.
En su libro Works Well With Others él plantea cómo las respuestas a esas preguntas sirven para tener claro qué tipo de relaciones tenemos y qué es lo que aportan a nuestra vida. Me gustó su visión y la comparto contigo pues si tu longevidad es directamente proporcional a la calidad de relaciones que tienes, entonces deberías valorarlas para que sepas si hoy contribuyen a que puedas vivir más y mejor, o no.
La prueba de 2 cervezas y 1 cachorro puede traer respuestas que te sorprendan. Amistades evaluadas bajo esta lupa quizá no dan el resultado que esperabas pues notarás que ya no está presente la confianza que existió en algún momento, o que su línea de pensamiento ya no te es agradable. Por otro lado, también puede ayudar a darte cuenta de que hay gente a tu alrededor con la que tienes más en común de lo que pensabas y fomentar ese lazo podría ser muy benéfico.
Entonces, según las respuestas positivas que des, existen 4 tipos de persona a tu alrededor:
Sí 2 cervezas y sí mi cachorro: son personas que te hacen feliz, en quienes confías. Podrías pasar días con ellos y sabes que, ante cualquier situación verán por ti y los tuyos. Busca rodearte, en mayoría, de personas de esta categoría.
Sólo 2 cervezas, no mi cachorro: son personas divertidas, pero no puedes confiar en ellas. Quizá no serían los mejores socios en un negocio o la mejor pareja a largo plazo.
Sólo mi cachorro: son personas de confianza, pero con las que no cruzarías la línea delgada hacia la amistad. Suelen ser buenos colegas de trabajo, vecinos, los papás de la escuela de tu hijo, etc. Con ellos existe confianza, respeto y cordialidad.
Ni cervezas, ni cachorros: son personas que ahora mismo no aportan a tu vida. Quizá debas conocerlas más o replantearte la relación.
Contestar de manera negativa una pregunta con alguien, no quiere decir que sea una mala persona o debas alejarte. Si es de tu interés, esto serviría como guía para mejorar la relación. Ojalá estés rodeado de personas que te aporten confianza y felicidad, y seas recíproco con ello. Estamos de paso en este mundo y venimos a ser felices, por ello te dejo una última reflexión ¿te tomarías 2 cervezas contigo y te confiarías el cuidado de un cachorro? Si una de estas respuestas es negativa, te invito a buscar un cambio porque no hay relación más importante para tu vida que la que tienes contigo mismo.
Por cierto, no estoy promoviendo que ingieras alcohol. Es solo una metáfora fácil de aplicar en la vida.
