Fitch Ratings dijo que persisten las presiones bajistas para las calificaciones soberanas en Latinoamérica y el Caribe, lo que refleja en parte un entorno macroeconómico en general más débil que llevó a la agencia recortar con fuerza su pronóstico de crecimiento para la región.
Según la agencia, la perspectiva de crecimiento para Latinoamérica y el Caribe se ha deteriorado en los últimos meses ante los persistentes contratiempos externos, en medio de una guerra comercial entre Estados Unidos y China que genera desafíos para la región, y las incertidumbres políticas internas.
"Lo anterior aumenta los desafíos que muchos países enfrentan para consolidar las cuentas fiscales y estabilizar las cargas de deuda pública", aseguró Fitch en un reporte.
Así, la agencia recortó con fuerza su pronóstico de crecimiento económico para 2019 a un 0.7 por ciento desde el 1.9 por ciento estimado en el segundo trimestre de este año.
"Un crecimiento mundial y chino más lento así como la volatilidad en los precios de las materias primas, vinculadas en parte a las persistentes incertidumbres relacionadas con el proteccionismo comercial, es un desafío externo clave para Latinoamérica", según Fitch.
Para la calificadora, el impulso para realizar reformas económicas y fiscales necesarias para impulsar el crecimiento de la productividad e incrementar la inversión, reducir los déficits y estabilizar la deuda pública en varias grandes economías es limitado.
"Los bancos centrales en Brasil, Chile, México y Perú ya han recortado las tasas. Sin embargo, los amplios déficit fiscales y desafiantes dinámicas de deuda seguirán pesando en la flexibilidad fiscal, limitando la capacidad de varios gobiernos en la región para estimular la demanda interna", agregó.
JAR