“Cada año la temporada de lluvias representa un problema para las empresas asentadas en el parque industrial Lerma, cada vez que se registra un encharcamiento o intensa precipitación afecta la operación, así como el acceso o salida de trabajadores y mercancía”, refirió Ariel Rodríguez Polo.
El presidente de la Cámara Nacional de la Industria de la Transformación (Canacintra) en la entidad, apuntó que si bien el ayuntamiento ha llevado a cabo trabajos de mantenimiento y desazolve del sistema de drenaje y canales, así como la Comisión del Agua del Estado de México (CAEM) hace lo propio en el río Lerma, cada vez que llueve se registran encharcamientos de 30 o 40 centímetros que impiden el paso del personal.
Pese a los esfuerzos –expresó- no es suficiente y el problema es cada vez mayor porque hay precipitaciones muy fuertes y en un tiempo muy corto.
Cuando llueve –mencionó- no solo se estanca el agua en las calles del parque sino en el acceso principal por San Mateo Atenco.
A diferencia del año pasado, afortunadamente el agua no ha afectado la materia prima de algunas empresas, sin embargo, la cuestión es que los camiones de carga no pueden entrar o salir fácilmente, pues si bien son más altos, el agua no permite maniobrar con las cajas o productos terminados.
LC