La Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal) alertó que la pandemia del Coronavirus (Covid-19) tendrá efectos devastadores sobre la economía mundial y, en específico, en América Latina estima una contracción de 1.8 por ciento del producto interno bruto, lo que podría llevar a que el desempleo en la región suba en diez puntos porcentuales; en México, el mayor impacto vendrá por las cadenas globales de valor.
En un comunicado, señaló que esto llevaría a que, de un total de 620 millones de habitantes, el número de pobres en la región suba de 185 a 220 millones de personas; en tanto que las personas en pobreza extrema podrían aumentar de 67.4 a 90 millones.
La secretaria ejecutiva de la Cepal, Alicia Bárcena, expresó que la crisis del Covid-19 pasará a la historia como una de las peores que el mundo ha vivido, pues la enfermedad pone en riesgo un bien público global esencial, la salud humana, e impactará a una ya debilitada economía mundial y la afectará tanto por el lado de la oferta como de la demanda.
Precisó que el coronavirus afectará a la región a través de cinco canales. El primero es el efecto de la disminución de la actividad económica de varios de los principales socios comerciales en las exportaciones de bienes de los países de la región. China, por ejemplo, es un destino importante para las exportaciones de varias economías latinoamericanas, siendo el principal socio comercial en los casos de Chile, Perú y Brasil. Cepal estima que las exportaciones de la región a ese destino podrían caer hasta 10.7 por ciento en valor.
Un segundo canal proviene de la caída en la demanda de servicios de turismo, que impactaría más severamente a los países del Caribe. Calcula que si la prohibición de viajes a causa del virus se prolonga por uno, dos, o tres meses, la actividad turística en el Caribe, por ejemplo, en 2020 se contraería en 8, 17 y 25 por ciento, respectivamente.
El tercer canal de transmisión se daría a través de la interrupción de las cadenas globales de valor y esto afectaría principalmente a México y Brasil, países que importan partes y bienes intermedios desde China para sus sectores manufactureros (en especial en los casos de repuestos para automóviles, electrodomésticos, productos electrónicos y farmacéuticos).
Un cuarto canal que afectaría a la región de América Latina y el Caribe está en la caída de los precios de los productos básicos (commodities), sobre todo para los países exportadores de materias primas en América del Sur.
Un quinto canal de transmisión se deriva de la mayor aversión al riesgo de los inversionistas y el empeoramiento de las condiciones financieras globales, lo que ya se ha reflejado en la fuerte disminución de los índices bursátiles en la región.
Alicia Bárcena recalcó la importancia de proteger de la crisis a los grupos más vulnerables, en especial los adultos mayores, los sectores de bajos ingresos y los más pobres.
“Ningún país podrá combatir esta pandemia sin la cooperación global y regional. Al final del día, lo que realmente necesitamos considerar es qué pasará con el multilateralismo. Debe haber más integración. Definitivamente debemos movernos hacia una mayor coordinación y la prioridad de las políticas debe ser cómo abordar la actual crisis social y de salud”, enfatizó.
lvm