De abril a junio, la cuenta corriente de la balanza de pagos registró un superávit de 5 mil 143 millones de dólares equivalente al 1.6 por ciento del producto interno bruto (PIB), el mayor desde que iniciaron los registros en 1980, favorecido por mayores exportaciones y captación de remesas, así como por una baja en las importaciones, de acuerdo con datos del Banco de México.
Lo anterior contrasta con el déficit de 1.1 por ciento reportado para el segundo trimestre de 2018 y con el déficit de 2.7 por ciento del primer trimestre de 2019.
El superavit se da en un entorno en el que la economía mundial se desaceleró y se intensificaron las tensiones entre Estados Unidos y otras economías, no solo comerciales, sino también migratorias y sobre tecnología, en el segundo trimestre de 2019 la cuenta corriente de México resultó superavitaria.
En particular, señaló que el aumento anual del saldo de la cuenta corriente al periodo fue reflejo, principalmente, de un incremento del superávit de la balanza de mercancías no petroleras, así como de una reducción del déficit de la balanza de servicios, lo que fue parcialmente compensado por una ampliación del déficit de la balanza de ingreso primario.
En este contexto, en el segundo trimestre de 2019 la economía mexicana continuó captando recursos por concepto de inversión directa y de otra inversión, si bien el saldo agregado de la cuenta financiera implicó un préstamo neto de México al resto del mundo, explicado por la evolución de la inversión de cartera y los activos de reserva.
Cuenta financiera de balanza de pagos registró salida de recursos
El Banxico indicó que en lo que respecta a la cuenta financiera de la balanza de pagos, ésta registró en el segundo trimestre de 2019 un préstamo neto que implicó una salida de recursos por 983 millones de dólares.
Por lo que señaló que dicho saldo se originó de endeudamientos netos de 4 mil 34 millones de dólares por concepto de inversión directa y de mil 584 millones de dólares en el rubro de otra inversión; de préstamos netos al resto del mundo de 3 mil 663 millones de dólares en el renglón de inversión de cartera y de 387 millones de dólares en el rubro de derivados financieros; y de un aumento en los activos de reserva de 2 mil 550 millones de dólares.
Además agregó que para 2019 y 2020 continúa anticipándose una expansión moderada de la economía mundial, en respuesta se han revisado a la baja las perspectivas de crecimiento principalmente por la mayor incertidumbre comercial y al menor crecimiento al estimado de las economías avanzadas como emergentes.
MRA