El tiroteo ocurrido el martes en una escuela primaria en Texas, Estados Unidos, dejó entre sus víctimas a dos parejas de primos fallecidos en el ataque, el cual reportó un total de 21 muertos, entre los que se registraron 19 menores de edad que estaban en un salón de clases cuando ingresó el atacante armado.
Según medios estadunidenses, los pequeños Jailah Silguero y Jayce Carmelo Luevanos eran primos, al igual que Annabelle Guadalupe Rodríguez y Jackie Cazares, los cuales estaban en el aula durante el ataque.
El tiroteo en la escuela primaria Robb de Uvalde es considerado como uno de los hechos más sangrientos en la historia de las masacres en Estados Unidos, el cual fue hecho por Salvador Ramos, un sujeto de 18 años que fue abatido por la policía tras atrincherarse.
Al The New York Times, Polly Flores, tía de Jackie, afirmó que la pequeña era muy unida a Annabelle.
"Ella era extrovertida, ella siempre tenía que ser el centro de atención… Era mi pequeña diva", dijo la mujer sobre la menor, quién además había hecho su primera comunión hace dos semanas.
En tanto, consideró que Annabelle era más introvertida y una estudiante destacada en el cuadro de honor de su clase.
La mujer afirmó también que la relación de ambas primas era tan estrecha que llegaba a provocar celos a la hermana gemela de Annabelle, quién recibe clases en casa.
"Hay unos pocos que no besarán ni abrazarán a nuestros bebés esta noche. A mi familia y a mí nos han quitado a mi niña. Estamos devastados en algunos aspectos, espero que nadie pase nunca esto... Nos duele hasta el alma… Que tu fallecimiento no sea en vano, algo se hará, te lo prometí. Ponte en paz con el resto de los ángeles, cariño”, lamentó Jacinto Cazares, padre de la pequeña Jackie.
El hombre, quién escribió en su cuenta de Facebook compartiendo el mensaje con una foto de la pequeña que estaba con su vestido de primera comunión, agregó que "papá, mamá, hermana, hermano y toda la familia te extrañarán por siempre".
La cadena Univisión afirmó que el padre de Annabelle esperó por varias horas para saber sobre su hija, enterándose en la tarde del fallecimiento de la pequeña tras el ataque.
La otra situación ocurrió con los primos Jailah y Jayce, donde uno de ellos no quería ir a la escuela el día del tiroteo, según The New York Times.
“No puedo creer que esto le haya pasado a mi hija… Siempre ha sido un miedo mío perder un hijo”, dijo Jacob Silguero, padre de Jailah, al medio estadunidense.
Afirmó que a ella siempre le gustaba ir a la escuela, pero el martes no tenía ganas, pero él le dijo que asistiera porque eran las últimas semanas del ciclo escolar.
Según lo confirmado por el medio estadunidense, al hombre le hicieron una prueba de hisopo para comprobar el ADN, revelando que era familiar de una de las víctimas.
En Univisión afirmaron también que los familiares de Jayce confirmaron que también estaba entre las víctimas del ataque en la primaria de Texas, Estados Unidos.
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