Nigeria confirmó hoy cinco nuevos casos de Ébola en Lagos y una segunda muerte por el virus, con lo que el número total de casos en la mayor ciudad del África subsahariana se eleva a siete.
Desde que surgió hace algunos meses, esta fiebre hemorrágica ha causado la muerte de 932 personas, según un informe de la OMS hecho público hoy. El parte anterior, publicado el 4 de agosto, registraba 887 deceso. Este balance señala 45 nuevos decesos entre el 2 y el 4 de agosto y 108 nuevas infecciones en cuatro países de África occidental: Guinea, Liberia, Sierra Leona y Nigeria.
El comité de urgencia de reglas sanitarias internacionales de la Organización Mundial de la Salud (OMS) comenzó hoy una reunión de dos días para decidir si esta epidemia constituye una "urgencia de salud pública de alcance mundial", que podría conducir a medidas a escala internacional.
Nigeria confirmó hoy cinco nuevos casos de Ébola en Lagos y una segunda muerte por el virus, con lo que el número total de casos en la mayor ciudad del África subsahariana se eleva a siete. "Nigeria ha registrado 7 casos confirmados del virus del Ébola", dijo el ministro de Salud Onyebuchi Chukwu, tras la confirmación de un segundo caso el lunes.
Los muertos en el país son un liberiano que trajo el virus a Lagos el 20 de julio y una enfermera que lo cuidó, agregó el ministro. "Todos los nigerianos a los cuales se les diagnosticó el virus del Ébola fueron contactos primarios" de Patrick Sawyer, quien trabajaba para el ministerio de Finanzas de Liberia y fue contagiado por su hermana, explicó Chukwu.
Sawyer viajó a Nigeria, el país más poblado del continente africano, para asistir a una reunión de responsables de África occidental. Murió en cuarentena el 25 de julio y desde entonces, el hospital donde estuvo internado fue clausurado. Los cinco pacientes con ébola son atendidos en una sala aislada en Lagos, indicó el ministro a los periodistas.
España se disponía hoy a enviar un avión militar a Liberia para repatriar y tratar a un misionero español de 75 años infectado por el virus del Ébola, anunció un portavoz del ministerio de Defensa. Un saudí que había estado en Sierra Leona y que presentaba síntomas parecidos a los del ébola falleció hoy de un ataque cardiaco en un hospital de Yeda (oeste), anunció el ministerio saudí de Salud.
Antes del español, dos estadunidenses, un médico y una misionera, que contrajeron el virus en Liberia, donde luchaban contra esta epidemia en una ONG humanitaria, fueron repatriados en los últimos días. Ambos fueron tratados con un anticuerpo experimental que nunca antes había sido ensayado en seres humanos, y que aparentemente, de acuerdo con los médicos que los trataron citados por el canal de televisión CNN, tuvo un efecto "milagroso" atenuando rápidamente los síntomas.
El director del Instituto Estadounidense de Alergias y Enfermedades Infecciosas (NIAID), el Dr. Anthony Fauci, preconizó sin embargo la prudencia, destacando que el suero tiene "cierta eficacia pero sólo en dos pacientes", así como la "enorme dificultad" para producir una cantidad significativa de dosis en esta etapa.
En la vecina Sierra Leona, el presidente Ernest Bai Koroma lanzó al ejército en la batalla contra el Ébola, ordenando el despliegue de cientos de soldados en los centros que albergan a los enfermos para hacer respetar las medidas de cuarentena.
El virus se transmite por contacto directo con la sangre, los líquidos biológicos o los tejidos de personas o de animales infectados. La fiebre que provoca se manifiesta fundamentalmente a través de hemorragias, vómitos y diarreas. Su tasa de mortalidad varía entre 25% y 90%.
Un portavoz del ministerio de Defensa español reveló que España se disponía hoy a sacar de Liberia a un misionero español de 75años, infectado de ébola y muy debilitado, el primer repatriado a Europa, después que Estados Unidos lo hiciera con dos de sus ciudadanos, por una epidemia que preocupa a la comunidad internacional.
El sacerdote Miguel Pajares, de 75 años, que trabajaba desde hacía tiempo en Liberia para la Orden Hospitalaria de San Juan de Dios, dio positivo en el test del virus del Ébola y había sido aislado en un hospital de Monrovia gestionado por una ONG vinculada a esa orden religiosa.
El mismo grupo había informado el domingo de la muerte del director del centro, el hermano africano Patrick Nshamdze, a causa de una enfermedad que mató a 932 personas en ese continente desde marzo, según el último balance de la Organización Mundial de la Salud (OMS).
Un "Airbus A310 medicalizado del ejército del aire para repatriar al sacerdote español infectado de ébola" llegó a Liberia a las 16:30 hora GMT de hoy tras haber salido de la base de Torrejón de Ardoz, cerca de Madrid, informó el ministerio de Defensa.
"Se han hecho los arreglos necesarios y será evacuado de un momento a otro para ser tratado en España. Lamentamos todo esto porque esta gente estaba en nuestro país para ayudar y se marchan enfermos", dijo a la AFP el ministro liberiano de Información, Lewis Brown.
Pajares se convertirá así en el primer enfermo de ébola --un virus que desde su aparición en 1976 mató a dos tercios de los infectados-- repatriado a un país europeo.
Estados Unidos había repatriado el sábado en avión medicalizado al doctor Kent Brantly y, tres días más tarde, a la misionera Nancy Writebol, que trabajaba con él en Liberia, ambos infectados por esta fiebre hemorrágica que hasta el 4 de agosto golpeó a 1,711 personas en cuatro países de África Occidental --Guinea, Liberia, Sierra Leona y Nigeria--, según la OMS.
Una vez de regreso a España, el misionero será ingresado en el hospital madrileño Carlos III, preparado a acoger a este tipo de pacientes, informó una portavoz del Hospital La Paz, de quien depende ese centro especializado en enfermedades tropicales. "La seguridad de los españoles está garantizada", aseguró en rueda de prensa Mercedes Vinuesa, directora general de Salud Pública en el ministerio español de Sanidad.
"Me levanta el ánimo esta noticia, es estupendo, estoy muy contento, merece la pena luchar", reaccionó el religioso, entrevistado por teléfono por el diario español ABC. "Quiero volver a España, por supuesto que sí", afirmó, agregando: "aquí no me fío para nada, la medicina es muy pobre, no tengo confianza".
Junto a él habían sido aisladas otras cinco personas, entre ellas dos misioneras, la congoleña Chantal Pascaline Mutwameme y la guineana Paciencia Melgar Ronda, también infectadas y cuya repatriación fue solicitada el martes por la ONG religiosa.
El avión enviado por España a Liberia está "equipado con los medios necesarios para trasladar con seguridad a tres pacientes sin riesgo de contagio", aseguró el ministerio de Defensa. Sin embargo un portavoz militar no estuvo en medida de precisar si en él viajarán también las religiosas.
"La solicitud que tenemos es la solicitud de los españoles y lo que contempla el país es la repatriación de los españoles", subrayó Vinuesa, recordando que hay también en Liberia una misionera de origen africano pero con pasaporte español cuya repatriación no fue aún decidida por no haber dado muestras de estar infectada.
"Lo que tenemos que esperar es que no dejen allí a las hermanas porque sabemos cuál es el final de allí", afirmó Begoña Martín, prima de Pajares, a la radio privada español Cadena Ser. "Como dice Miguel están condenados a la muerte, no podemos dejarlos morir de esa manera", afirmó.