El presidente cubano, Miguel Díaz-Canel, llegó a Nueva York para asistir a las sesiones de la Asamblea General de la ONU, en lo que constituye además su primera visita a Estados Unidos, en momentos en que las relaciones entre La Habana-Washington están en picada.
Según un informe oficial, el mandatario tiene previsto denunciar en la ONU el bloqueo estadunidense a su país. La Asamblea General volverá a discutir y pronunciarse sobre este asunto en la actual sesión.
El mandatario aprovechará su estancia en Nueva York para reunirse en paralelo con políticos y empresarios estadunidenses interesados en reanimar las relaciones entre los dos países.
Sin embargo, parece poco probable que dialogue con algún miembro del gobierno del presidente Donald Trump.
Igualmente se reunirá por separado con varios mandatarios, entre ellos el presidente del gobierno español, Pedro Sánchez, el próximo martes.
Madrid informó que “hay interés por las dos partes" en que en ese encuentro "se hable de todo", incluido un posible viaje de Sánchez a Cuba, y el peso que España puede tener en los cambios económicos que se registran en la isla.
El presidente cubano será el décimo quinto jefe de Estado que hable en la Asamblea General de la ONU el 26 de septiembre, jornada dedicada a conmemorar el Día Internacional para la eliminación total de las armas nucleares.
Ese día se reunirá por separado con el Secretario General de la ONU, Antonio Guterres, y con Bill de Blasio, alcalde de Nueva York.
Díaz-Canel fue despedido en la terminal aérea de La Habana por el primer secretario del Partido Comunista, Raúl Castro.
jamj
