La nominada a secretaria de Seguridad Interna, Kristi Noem, consideró que la “zona de guerra” en la frontera México-EU es la mayor “amenaza” a la seguridad de Estados Unidos y prometió frenar a la “invasión” de migrantes, con la restauración del programa Quédate en México, la terminación del muro y la eliminación de la aplicación CBP One, así con la cacería de unos 450 mil migrantes “criminales, asesinos y violadores”.
En su audiencia de confirmación ante el Comité de Seguridad Nacional del Senado, la aún gobernadora de Dakota del Sur responsabilizó al gobierno de Joe Biden de la situación en la frontera con México y de haber permitido el ingreso y la permanencia en Estados Unidos de cientos de “miles de migrantes criminales”.
“Todos estamos de acuerdo en que la principal amenaza a nuestra seguridad nacional es la frontera sur. De hecho, desde que Joe Biden es presidente, hemos visto a 382 personas que han cruzado esa frontera y que están en la lista de vigilancia terrorista”, dijo a los senadores del panel.
“El presidente Trump obviamente ganó las últimas elecciones con un mandato claro, y ese mandato es que el pueblo estadunidense asegure esa frontera”, afirmó frente a los legisladores.
De acuerdo con Noem, las prioridades de acción de DHS (el Departamento de Seguridad Interna, por su sigla en inglés) y las agencias federales bajo su jurisdicción, incluida la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP) y la Oficina de inmigración y Cumplimiento Aduanal (ICE), serán 12 mil migrantes que son asesinos, 16 mil que son violadores y 425 mil que han cometido delitos.
Después estarán más de 1.2 millones de migrantes que enfrentan órdenes de deportaciones.
“El actual gobierno (del presidente Joe Biden) no está haciendo nada para detenerlos y deportarlos. Nosotros lo haremos de inmediato y esa será la prioridad”, enfatizó.
Fuentes cercanas al equipo de Trump filtraron a medios que el plan es desatar una ofensiva estilo “Shock & Awe” (“Conmoción y Pavor”) de la Guerra del Golfo, pero en migración, con la declaratoria de emergencia nacional, redadas laborales en grandes centros urbanos, despliegue de activos militares a la frontera con México, entre otros.
“El presidente y yo hemos hablado extensamente sobre esto y nos asociaremos ciento por ciento con él para restablecer la política de Quédate en México y asegurarnos de que esté vigente”, deslizó Noem en la audiencia senatorial, aunque reconoció que será necesario negociar con el actual gobierno mexicano.
Otra víctima de las primeras acciones de Trump será la aplicación CPB One, que ha permitido calendarizar más de 900 citas migratorias.
Pero al mismo tiempo, reconoció que es necesario abordar aquellos temas que alimentan la violencia en México, en alusión el tráfico de armas hacia el sur y el trasiego de dinero en efectivo, dos asuntos a los que el gobierno de México ha tratado elevarles el perfil en la agenda bilateral.
En este contexto avanzó en el Senado a voto final la que probablemente será la primera iniciativa de ley anti migratoria de la era Trump, la ley Laken Riley, en honor a la joven asesinada por un indocumentado venezolano que obligará a las agencias migratorias a detener y deportar sin debido proceso a todo extranjero no autorizado acusado de delitos menores.
Complot del clima
Donald Trump anunció que su discurso de investidura del próximo lunes, junto con otros actos de su toma de posesión, se celebrarán en el interior del Capitolio, en lugar de en las escalinatas exteriores, debido a las bajas temperaturas.
“He ordenado que el discurso de investidura, junto con las oraciones y otros discursos, se celebren en la rotonda del Capitolio de Estados Unidos, como hizo Ronald Reagan en 1985 también por el clima extremadamente frío”, escribió en su red social, Truth Social.
El lunes próximo se espera en Washington una temperatura máxima de -5 grados y mínima de -12 grados Celsius, aunque la sensación térmica podría ser mucho más baja por los intensos vientos.
