Gabriel Fernández, refuerzo de Pumas para este Apertura 2023, vivió momentos de tensión e incertidumbre en el 2018, cuando se vio envuelto en un accidente automovilístico en el que una joven de 18 años perdió la vida.
El 29 de diciembre, del año antes mencionado, Gabriel Fernández circulaba a exceso de velocidad por las calles de su natal Montevideo, Uruguay cuando atropelló a Romina Fernández, quien pretendía cruzar la calle para tomar un taxi.
La joven fue trasladada a un hospital con severas lesiones internas y externas; mientras el Toro fue detenido por las autoridades uruguayas. Cinco meses después del lamentable hecho, Gabriel Fernández fue imputado por los delitos de lesiones graves, motivo por el cual fue sometido a medidas cautelares por dos meses (60 días), por lo que no pudo salir del país sin autorización judicial, así como le fue retirada su licencia de conducir y permanecer dentro de su domicilio de las 10 de la noche a las seis de la mañana.
Debido a las graves lesiones que le causó el ahora futbolista de Pumas, Romina Fernández permaneció durante un año en estado vegetativo y falleció en un hospital de Montevideo el pasado 3 de marzo del 2020.
A pesar de que Romina falleció, la situación legal de Gabriel Fernández no cambió en materia civil ni penal, pues previo al deceso de la joven de 18 años, el Toro llegó a un acuerdo económico con la familia de la víctima el 24 de junio del 2019, donde habría reparado los daños con 800 mil dólares en una sola exhibición, así lo informaron a la agencia noticiosa EFE fuentes del caso
El 22 de enero del 2019, el Toro Fernández fue anunciado como refuerzo del Celta de Vigo y en esa temporada sumó 492 minutos y únicamente anotó un gol.