En la actualidad, son diversos los factores que impulsan a las personas a dejar su país y emprender un largo camino, con la esperanza de hallar nuevas alternativas que les permitan mejorar su condición de vida y la de sus familias. En este trayecto, quienes migran se enfrentan a situaciones de discriminación, explotación y violencia, encontrándose en un estado de vulnerabilidad notable que, en ocasiones, los convierte en víctimas de delitos diversos que atentan contra su dignidad.
Aunado a lo anterior, este grupo sufre agravios en las raíces culturales, la lengua y las normas sociales, en virtud de que, al emprender su viaje, pierde su lugar de pertenencia, conviviendo en un entorno donde impera una lengua extranjera, rodeado de personas con tipos de conducta sociales diferentes.
En el ámbito internacional, son diversos los instrumentos que establecen prerrogativas a favor de las personas migrantes, entre los cuales destaca la Convención Internacional sobre la Protección de los Derechos de Todos los Migrantes Trabajadores y Miembros de sus Familias de 1990, que señala que los Estados partes se comprometen a respetar y asegurar los derechos de los trabajadores migratorios y los de sus familiares que se hallen dentro de su territorio o sometidos a su jurisdicción, sin distinción alguna por motivos de sexo; raza; color; idioma; religión o convicción; opinión política o de otra índole; origen nacional, étnico o social; nacionalidad; edad; situación económica, patrimonio; estado civil; nacimiento o cualquier otra condición.
En nuestro país, la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos consagra en su artículo primero que todas las personas gozan de los derechos humanos reconocidos en ésta y en los tratados internacionales de los que el Estado mexicano sea parte, así como de las garantías para su protección, es decir, independientemente de su situación migratoria, todas las personas tienen los mismos derechos, los cuales deben ser salvaguardados por las diversas autoridades en su estancia por nuestro país, garantizando su dignidad y protección de su vida y salud.
