La moderna y casual sucursal de Garabatos en Mitikah es el punto de encuentro; el chef ejecutivo Leo Pérez da la bienvenida; y enseguida propone disfrutar del nuevo Brunch que ha creado para Primavera: “Un bowl de papaya, Un tiradito de salmón o bien unos Baja Fish Tacos e incluso unos Huevos Benedictinos o bien otro clásico como es el Pan Francés”.
Todos, dice: “Se pueden disfrutar de mañana o bien pasado el mediodía, aunque en realidad están a la carta todo el tiempo”.
Sin embargo, el coqueteo de las clásicas galletas, que se ofrecen en la isla a unos cuentos metros del restaurante, cobra presencia. Y es justo cuando el chef aclara a pregunta expresa.
“En Garabatos siempre hubo alimentos, pero la marca crece a partir de la galleta, por eso la gente nos identifica como galletas, pan, postres, incluso cuando dices, también hay alimentos, muchas personas se sorprenden”.
La diversidad de panadería que se ha colocado en la mesa, (croisant con queso mascarpone y guayaba, con Nutella, conchas, panques, entre muchos más) acapara la mirada; y en ese momento, el chef relación con la marca supera los 9 años, responde a la pregunta de ¿cuál es el origen de Garabatos?
“Abraham Bleier, el dueño, dice que sus papás se vienen a México huyendo de la guerra en Europa. Y empiezan a ver la forma de salir adelante. Ponen una tienda de ropa, pero no les va bien; y es cuando la mamá del dueño, la señora Elvira, dice: ´Vamos a hacer galletas en el garage´, mismas que el señor Emmanuel, papá de Abraham repartía en una pequeña vitrina”.
Ese fue el detonante de lo que hoy se conoce como Garabatos, cuya insignia es la galleta que, actualmente, en sus diversas tiendas y restaurantes se produce diariamente.
“Al día hacemos un aproximado de 3000”, precisa el chef y añade: “Y al igual que todo el pan que elaboramos se hace en un proceso artesanal”.
Incluso destaca que “el garabato (que dio nombre a la empresa), de cada galleta se hace manualmente. Podríamos tener una máquina que lo hiciera, la filosofía de la marca es conservar la tradición con que nació”.
La variedad gastronómica en la mesa ha cambiado, ahora la Ensalada tentación acapara la mirada por la combinación de colores, el verde de las frescas lechugas y jugosas uvas, el blanco del queso, el rojo de las fresas que resalta ante el beige de la pechuga que se combina con el aderezo de mango.
“Estos platillos se han pensado para brindar una opción adecuada a la temporada de Primavera a nuestros comensales”, dice el chef cuando una variedad de aguas, cuyos protagonistas son la hierbabuena, el limón, la sandía y los frutos rojos se suma a la escena.
Sin embargo, el experto añade que los grandes clásicos de Garabatos, como son “Los chilaquiles, las enchiladas y los huevos Veracruz se mantienen en la carta todos los días”.
Claves
- En 1985 se funda la primera boutique y en 1988 montan el primer restaurante.
- La sucursal de Polanco es parte de la historia de la marca y emblema de la tradición de ir a tomar café y la galleta Garabatos.