Vecinos de la colonia El Huizachal, donde viven militares, muchos de la tercera edad y siete colonias más, denunciaron que otros grupos devastaron árboles en un lindero de una barranca de propiedad federal, limítrofe entre Naucalpan y Huixquilucan, para construir un desarrollo habitacional.
Explicaron que iniciaron excavaciones para un proyecto que contempla la construcción de 421 casas en la ladera de la reserva ecológica de la barranca denominada El Chamizal, donde corre tubería de gran diámetro para abastecer agua del Sistema Cutzamala a la Ciudad de México, por lo que también hay riesgo de que la fracturen con las maquinas que utilizan.
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Dijeron que se proyecta construir un túnel que cruzará el subsuelo de la avenida Emilio Gustavo Baz y de algunas de sus comunidades, que serán afectadas en servicios por el nuevo desarrollo habitacional.
Los afectados exigieron la intervención de los alcaldes Edgar Olvera Higuera, de Naucalpan, y Enrique Vargas del Villar, de Huixquilucan, pues la reserva ecológica de El Huizachal se encuentra en los límites de ambas comunidades y exigieron frenar el proyecto que destruirá una superficie forestal de 18 hectáreas de zona natural protegida.
Este jueves, se reunieron cerca de150 vecinos, muchos de ellos adultos mayores, que durante tres horas marcharon y bloquearon de manera intermitente la avenida Emilio G. Baz, frente al Colegio Miraflores, para rechazar el proyecto inmobiliario en un área que el 16 de agosto de 1994 fue decretada por el gobierno del Estado de México como natural protegida.
Rubén Velazco, delegado de la colonia El Huizachal, acusó que fue la alcaldía de Huixquilucan la que autorizó construir en la barranca y que el alcalde Enrique Vargas del Villar debe explicar por qué efectuó un acto de gobierno en un área que no es de su jurisdicción.
Por otra parte, un colono proporcionó una copia de un convenio preliminar firmado por el secretario del ayuntamiento de Naucalpan, Horacio Jiménez, con una empresa constructora, en el cual el gobierno acepta la reubicación de un área deportiva contigua a la barranca y dar facilidades para la realización del proyecto inmobiliario.
El espacio deportivo, al momento, aloja una cancha de basquetbol y una de fútbol en deterioro. Hace dos meses los colonos pretendieron invertir en mejoras para el lugar, pero policías municipales se los impidieron, acusaron.
Aseguraron que también entregaron oficios a la Secretaría del Medio Ambiente, en los que exigen al titular, Raúl Vargas, que frene la ocupación de la barranca, pero después de más de medio año no han tenido respuesta.
MCLV
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