Gerardo Adolfo quien es el elemento de la Policía Municipal de Torreón que arriesgó su vida e ingresó a un domicilio en llamas para salvar a un ciudadano que estaba atrapado al interior, nos cuenta su historia.
Con 26 años de edad, policía, esposo y padre de familia de cuatro pequeños, Gerardo Adolfo Martínez se ha convertido en un héroe de la ciudad, al salvar a un hombre de un incendio.
Gerardo cuenta que el turno parecía ser tranquilo, había estado con sus compañeros en un filtro de revisión, después llegó a las instalaciones de la Dirección de Seguridad Pública Municipal ( DSPM) y de ahí acudieron a atender un reporte en la colonia La Fuente, lo que sin saber, lo situó cerca del incendio.
Motivado desde pequeño por un tío que era policía, Gerardo vio en su familiar un ejemplo a seguir y fue entonces que mantuvo clara su meta y sueño, ser un agente de la seguridad, mismo que pudo lograr hace dos años, cuando concluyó la academia de Policía y se entregó a las filas de la DSPM.
Comenta que es la actitud de servicio lo que más le gusta y la principal característica que heredó de su tío.
"Desde muy chico era mi sueño ser policía y el servir siempre ha movido, me gusta servir a la gente, ayudar y apoyar", mencionó.
Fue este pensamiento, lo que lo llevó a arriesgar su vida, pues cuando circulaba en la unidad por las calles de la colonia La Fuente, vieron una cortina de humo, por lo que decidieron acercarse a ver qué pasaba, pues aún no tenían reporte de algún siniestro.
Gerardo iba acompañado de Martha Yadira Guevara, de 24 años de edad, compañera con tres años de servicio activos en la Policía, quienes sin saberlo fueron los primeros en llegar, encontrando que se trataba del incendio de una casa, donde tres mujeres pedían apoyo, pues al interior seguía un hombre.
Gerardo ingresó a la casa por la puerta principal, pero el humo era demasiado denso y las llamas estaban fuera de control, por lo que al darse cuenta de que no iba a poder seguir avanzando, decidió buscar una ruta alterna.
Mientras tanto, Martha realizó el reporte a Cruz Roja y a Bomberos, además contuvo a las adolescentes y a la mujer de la tercera edad que trataban de ingresar a la casa para sacar a su familiar.
Por su parte, su compañera pidió cobijas y agua a los vecinos, por lo que se cubrió con la cobija mientras que Martha lo mojaba para que pudiera entrar al domicilio.
Mientras Martha apoyaba a los familiares, Gerardo brincaba una barda aledaña al domicilio, pues encontró que la mejor opción para entrar era por el patio de la casa.
"Subí una barda por un lado, por una quinta que está en construcción, con ayuda del señor que cuida la quinta colocamos una tabla para poder subir y ya estando arriba al llegar al patio liberé al señor pero no había por dónde salir", platicó Gerardo.
Al ver que el hombre estaba en shock y no podría brincar la barda solo, Gerardo lo cargó en peso y lo empujó por la barda para poner su vida a salvo y después él brincó de regreso.
Recuerda que al estar entre el humo y las llamas sintió miedo, pero en su mente lo importante era salvar al ciudadano, pues ante todo mantiene su actitud de servicio.
"El miedo nunca falta pero más que nada el salvarle la vida a la persona, ya al interior se cierra uno completamente pero hay que mantener la calma, traté de mantener la calma".
Finalmente el elemento señala que se siente contento de haber ayudado a alguien y que todo lo que hizo salió de su instinto, además al preguntarle por qué lo hizo, Gerardo destaca que es su labor como policía, estar al servicio de la sociedad.
"Es nuestra labor el ayudar y servir y pues ahora sí que darnos cuenta que había una persona al interior y que si uno no lo hacía la persona podía morir".
EGO