Cronistas e historiadores se reunieron en el restaurante "El Charro" para solicitar su protección, ante el proyecto de construir un paso deprimido en la carretera Nacional, a la altura de El Álamo.
Frente a la icónica arquitectura del negocio en forma de sombrero charro, los inconformes protestaron contra el proyecto propuesto por el Ayuntamiento de Santiago y con recursos federales.
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Historiadores y cronistas, miembros de distintas agrupaciones estatales, consideraron que la obra del paso deprimido puede hacerse unos kilómetros más adelante, para que no dañe la arquitectura de la comunidad.
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Por su parte, la familia propietaria del restaurante aseguró que nadie les ha consultado sobre la viabilidad de la obra, no obstante se han enterado vía las redes sociales del Ayuntamiento por el interés de construir el paso deprimido.
El restaurante "El Charro" data de 1940 y junto al otro restaurante El Álamo forman parte del patrimonio arquitectónico y gastronómico del llamado Pueblo Mágico de Santiago.