La flota camaronera del Golfo de México inició paro de brazos caídos por tiempo indefinido y realizó este miércoles una manifestación para rechazar el retiro del subsidio al diésel marino por parte del gobierno federal.
En el primer minuto de este día concluyó la veda del camarón, y a diferencia de lo que ocurre cada año, en está ocasión los barcos no salieron a la captura de la especie, pues señalan que el costo del combustible y demás insumos, hace poco redituable la actividad.
Acusaron que los pescadores de Estados Unidos pagan el combustible a siete pesos y los de México a más de 20 el litro; con eso no pueden competir.
Explicaron que cada embarcación logra pescar un promedio de 8 toneladas de camarón, pero en ese tiempo el gasto del barco es de 800 mil a un millón de pesos.
El paro de más de 500 barcos no sólo afecta a los siete u ocho pescadores que en promedio van en cada embarcación, sino a quienes trabajan en las embazadoras de mariscos y a las peladoras de camarón, así como al comercio establecido que avitualla las naves.
En Alvarado, los pescadores esperan que las autoridades federales reintegren el subsidio suspendido este año, pues de lo contrario no podrán trabajar. Al grito de precio competitivo del diésel y queremos pescar, los hombres y mujeres del mar marcharon por el malecón costero de Alvarado, en un paro nacional de camaroneros.
RLO