Previo al Clásico tapatío entre Chivas y Atlas, los accesos al Estadio Omnilife resultaron complicados pues las avenidas presentan carga vehícular con paso a vuelta de rueda y al momento de acercarse al inmueble tres cercos de seguridad esperan para revisar a los asistentes como control de seguridad.
Durante la semana se informó del operativo de seguridad para que la afición tomara sus precauciones y llegar con anticipación. Pero un partido de alta convocatoria no impidió que se viva el tráfico y largas filas para ingresar al estadio.
Una vez cerca del inmueble el filtro vehícular hace esperar a quienes van en auto y generar tráfico. El siguiente paso es el peatonal en el perímetro del Omnilife, con largas filas. Finalmente el último filtro se presenta a la entrada del inmueble para entregar el boleto y set revisado una vez más. Todo esto a la espera de que sea un Clásico sin violencia.
Cabe destacar que los filtros son más severos con el público que llega a pie, pues a los autos en su mayoría pasan sin revisión llegando hasta el filtro final.