Patricio González Suárez, presidente de la Asociación de Bares y Restaurantes (ASBAR) del Valle de Toluca, señaló que las inspecciones a las instalaciones de gas LP o natural, tanques estacionarios o similares son anuales y en caso de que Protección Civil municipal o estatal encuentren alguna irregularidad, establecen sanciones y en algunos casos suspensiones temporales a los negocios.
Refirió que cualquier negocio debe tener una autorización que se renueva cada año, donde los negocios de bajo impacto como cafeterías o loncherías requieren un Plan de Emergencia Municipal, mientras que los giros de alto impacto como los restaurantes-bar, discotecas o cantinas necesitan un Plan de Emergencia Estatal, el cual es más estricto.
"Para renovar el Plan de Emergencia Estatal es necesaria la firma de un perito especialista en instalaciones de gas o electricidad, según sea el caso. El pago de derechos para refrendarlo cuesta entre 2 mil y 3 mil pesos y el municipal no tiene costo".
Además de que existen diferentes especificaciones para las instalaciones de gas como que deben estar pintadas de rojo, deben pasar por un lugar determinado a ciertas distancias o bien los tanques de gas no pueden estar en lugares cerrados y cosas de ese tipo.Explicó que cuando hay operativos colegiados por parte de Protección Civil, la Comisión para la Protección contra Riesgos Sanitarios del Estado de México (Coprisem) y los ayuntamientos, cada uno hace su revisión y observaciones. En el caso de Protección Civil –agregó- si existe alguna falla porque los tanques de gas están muy viejos, las válvulas están desgastadas, los cables expuestos o no tienen extintores, puede sancionar y suspender el permiso del establecimiento hasta que el dueño subsane las deficiencias.
"Algunos agremiados han sido sancionados por fallas menores y hemos tenido otros casos de cierres de negocios por faltas más graves. Cuando te llega una suspensión debes comprobar que ya arreglaste los problemas u observaciones, y seguir el procedimiento para poder abrir, entre más rápido es mejor".
Tras la explosión de un negocio en Nezahualcóyotl por acumulación de gas, expresó que pese a las inspecciones de Protección Civil también es responsabilidad de los dueños mantener en buenas condiciones sus instalaciones, pues es imposible tanto para la dependencia estatal o municipal revisar los más de 24 mil negocios de ese tipo que hay en el estado.
Actualmente –precisó- el 20 por ciento de sus agremiados son giros de alto impacto y el 80 por ciento restante son de mediano y bajo impacto. "El 90 por ciento de los negocios de bajo y mediano impacto cuentan con cocina o instalaciones de gas porque venden comida".
RAM