Pese a tener un déficit de mil 600 elementos, la Patrulla Fronteriza incrementó sus aprehensiones en el 2016 un 23 por ciento con respecto al 2015, de acuerdo con el informe anual del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas de los Estados Unidos (ICE, por sus siglas en inglés).
Mientras que el año pasado fueron 415 mil 816 capturas de personas, en el 2015 se detuvieron a 337 mil 117, de las cuales fueron deportados 224 mil 510 inmigrantes indocumentados en el 2016 y 193 mil 951 en el 2015.
Adicionalmente, una fuente al interior de la Patrulla Fronteriza reveló que la migración de mexicanos ha disminuido, mientras que la de los centroamericanos ha aumentado con un 30 y 70 por ciento, respectivamente.
Aunque las cifras revelan un aumento de aprehensiones y deportaciones, el vocero advirtió que la falta de recursos, infraestructura y efectivos dificulta cada vez más el trabajo diario.
Por lo que el cambio de administración y órdenes ejecutivas para endurecer las políticas migratorias, emitidas por la Casa Blanca, otorgaría a la Border Patrol más recursos y cinco mil nuevos efectivos para el próximo año fiscal, según las declaraciones del presidente Donald Trump.
“La gente piensa que las órdenes ejecutivas fueron creadas, pero no lo son, todo lo que hacen es darnos permiso para hacer el trabajo que debemos hacer, todas esas leyes ya estaban en los libros.
“Lo único que ha cambiado es que nos dan permiso de hacer nuestro trabajo con la administración pasada era como que ‘no’”, indicó el vocero.
El informe de la dependencia federal expone que la diferencia entre las personas que son capturadas de las que son deportadas se debe, en gran medida, a que no se cuenta con los recursos suficientes para repatriar a todos, por tal motivo, muchos son liberados.
Adicionalmente, el hecho de que sean inmigrantes indocumentados y no mexicanos genera un problema económico para el país. Esto porque el costo de deportación es más elevado.
“Se requiere más tiempo, recursos de personal y financiamiento para completar el proceso de remoción de nacionales de Centroamérica y otros países no contiguos en comparación con los nacionales mexicanos aprehendidos en la frontera.
“Estos costos han aumentado debido a que la remoción de nacionales no mexicanos requiere que la ICE use la capacidad de detención adicional, más tiempo y esfuerzo para obtener documentos de viaje del país anfitrión y organizar el transporte aéreo para llevar a la persona al país de origen”, narra el documento.
El vocero de la patrulla fronteriza explicó que la zona con mayores índices de criminalidad y captación de droga es Yuma, Arizona, seguido por Río Grande, Roma, en Texas, en donde se viven condiciones precarias e insalubres, dijo, y las disputas entre grupos del crimen organizado están a la orden del día.