El ayuntamiento de Valle de Bravo no abrió sus puertas la mañana de hoy presuntamente para evitar un embargo, afectando a cientos de personas quienes no pueden realizar sus trámites correspondientes.
Por su parte el presidente municipal, Francisco Reynoso Israde junto con el cuerpo edilicio no se presentaron a un evento que tenían programado, sin que al momento se conozcan las razones.
Más tarde, el alcalde acudió a otro evento; sin embargo, las oficinas del palacio municipal continúan cerradas.
Las deudas de los ayuntamientos han provocado situaciones de esta naturaleza, como el caso de Zinacantepec, en donde cerraron el acceso al Palacio Municipal para evitar una orden de embargo o en San Mateo Atenco, a quienes les fueron retendias dos barredoras en agosto pasado.
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