A dos años de distancia, habitantes de 185 comunidades ubicadas en la Montaña de Guerrero reclaman la atención que las autoridades estatales y federales comprometieron tras la embestida de la tormenta tropical 'Manuel' y el Huracán 'Ingrid', pues aseguran que hasta el momento les han dado un trato desigual y discriminatorio.
En Chilpancingo, autoridades que integran el Concejo de Comunidades Damnificadas de la Montaña señalaron que fueron los propios afectados los que en 2013 debieron presionar para romper un cerco informativo impuesto por las autoridades, para ello debieron impulsar marchas y cierres de carreteras.
La presión de las autoridades comunitarias, aunado a los llamados de auxilio lanzados en ciudades como Acapulco y Chilpancingo propiciaron que el presidente de la República, Enrique Peña Nieto anunciara la inversión de 30 mil millones de pesos, con la intención de ayudar a la población a recuperarse de la devastación.
Abel Barrera Hernández, director del Centro de Derechos Humanos de la Montaña (CDHM) refiere que a la fecha el Concejo de Comunidades Damnificadas ha realizado 23 reuniones con diferentes dependencias del gobierno federal, pero los avances hasta el momento son mínimos.
Ante la devastación en las tierras de cultivo, las autoridades comunitarias plantearon el impulso de un programa denominado "Que llueva maíz en la Montaña", el cual consiste en dotar de granos básicos a 16 mil familias que se incorporaron a dicho órgano, en febrero de 2014 se firmó el acuerdo encaminado a garantizar la cobertura de las familias afectadas, sin embargo, el burocratismo registrado en la Comisión Nacional para el Desarrollo de los Pueblos Indígenas (CDI) impidió que se diera el cumplimiento adecuado.
Entre las complicaciones más severas que reportan está lo relacionado con el tema de la vivienda, pues la Secretaría de Desarrollo Agrario Territorial y Urbano (Sedatu) se comprometió a construir cuatro mil 351 casas, pero el Concejo realizó un recuento en el que se obtuvo el dato de dos mil 998 familias no incorporadas al padrón de la dependencia federal.
Los representantes de la dependencia federal solamente han acudido a los municipios de Acatepc, Tlacoapa y Malinaltepec, por lo que les falta acudir a por lo menos 10 municipios de la región, pese a que ya pasaron dos años del meteoro.
Del recuento
De acuerdo a los datos proporcionados por el Concejo de Comunidades Damnificadas, hay todavía tres comunidades con CENDIS afectados, uno de ellos considerado en pérdida total, 33 comunidades con kínders dañados en paredes, además de que los techos están en riesgo de desplomarse; 32 pueblos reportan sus primarias con grietas en las paredes, goteos y pérdidas totales.
En nueve comunidades las secundarias también están dañadas y cuatro bachilleratos también se han convertido en factor de riesgo.
A la fecha 49 pueblos reportan su red de agua potable destruida, 21 comunidades reportan daños no atendidos en puentes colgantes, de tal manera que los niños deben atravesar el río para llegar a sus escuelas.
Hay 20 puentes vehiculares con daños no revisados y 75 localidades todavía registran deslaves que obstruyen parcialmente sus caminos.
Más aún, en el recuento del Concejo se anota que por lo menos 28 pueblos están en alto riesgo y han solicitado su reubicación, aunque a muchas no llegó el personal de Protección Civil para dictaminar el nivel de daño que sufrieron.
A la fecha, indicaron que no se ha reubicado a comunidades como Moyotepec, Tilapa, El Tejocote, Alacatlatzala, Llano de Heno, La Canoa, Campo de Aviación Florida, Paraje Montero, Laguna Seca, Portosuela de Peras, Santa Cruz del Rincón, Xochiatenco, Capilla de Sauce, Unión de las Peras y San Miguel, en el caso de Malinaltepec.
En el caso de Atlamajalcingo del Monte, hace falta la reubicación de Juquila, Huehuetepec, Chinameca y Alvaro Obregón.
De San Luis Acatlán se requiere la reubicación de Altepec, Barrio de Guadalupe y Pie de Tierra Blanca, en tanto de que de Acatepec debe desplazarse a la población de Lomadad.
De Copanatoyac se percibe como inhabitable a Tlacotepec, Totomixtlahuaca en el caso del municipio de Tlacoapa y Valle Hermoso en Metlatónoc.
Hasta el momento, de acuerdo a los integrantes del Consejo, el gobierno federal no ha dado el respaldo prometido, razón por la que no descartan la posibilidad de reactivar las protestas.