J Balvin no decepcionó. Aunque llegó casi dos horas tarde al escenario, con su espectáculo, carisma, música y una escenografía que impresionó, puso a vibrar, bailar y cantar a los miles de tapatíos que lo acompañaron este viernes en su paso por Guadalajara como parte de su Vibras World Tour.
El reggaetonero volvió a la ciudad ayer después de un año de ausencia. Gromara fue el encargado de calentar la noche sin impresionar a los asistentes, quienes le regalaron la ovación más grande cuando preguntó: "¿Quién quiere ver a J Balvin?".
Aunque pasó casi una hora entre el primero en pisar el escenario y Balvin, las canciones de reggaetón que sonaron encendieron el ambiente, y aquellos que dejaron pasar de largo a un desconocido Gromara, corearon y bailaron las pistas de Daddy Yankee, Don Omar y Wisin y Yandel, hasta que se apagaron las luces y el colombiano salió; una hora y cuarenta y cinco minutos después de lo citado.
Por fin se apagaron las luces, un video de introducción se proyectó en el telón que cuando se abrió descubrió a J Balvin acompañado de un enorme dinosaurio morado del alto del escenario. Abrió con "Machika" y en lugar de bailarines, pequeños dinosaurios amarillos lo acompañaron, en la que sería la primera canción de un show lleno de energía.
Pasaron tres canciones y el gigantesco animal inflable se transformó en una cara naranja que movía los ojos mientras los tapatíos movían de un lado a otro el cuerpo con "X"; los bailarines aparecieron y con sus enérgicos pasos aportaron al ambiente que se vivía en el recinto. "No Es Justo", "Ahora Dice" y "Otra Vez", vinieron después y fueron de las más coreadas.
El auditorio subió de temperatura con "Downtown", canción que interpreta con Anitta y en la que Balvin se sentó en una silla al centro del escenario para disfrutar de un sensual baile que le hizo una de sus bailarinas.
La noche avanzó y cuando parecía que ya no quedaban más sorpresas enormes costillas, una gigante cola de dinosaurio y una parte en la que todo el ambiente se puso tropical con "I like it", demostró por qué el colombiano es uno de los mejores reggaetoneros de estos tiempos y porque siempre es recibido con los brazos abiertos en Guadalajara.
Para cerrar la noche, José apareció al interior de un huevo de casi el triple de su tamaño y cantó "Mi Gente", tema que esta vez llevó un ritmo más electrónico y puso a saltar a todos aquellos que por casi dos horas vibraron juntos en un rincón de la ciudad gracias al reggaetonero y su espectáculo, que sorprendió y que provocó que saliendo del recinto se escuchara a una de las jóvenes decir: "está mucho mejor que Maluma".
GPE