Ser parte de una de las comedias más influyentes de la televisión puede marcar para siempre la carrera de un actor. Eso le ocurrió a Ralph Ineson, quien interpretó a Chris Finch en la versión británica de The Office.
Años después del estreno original, y tras ver crecer la popularidad del remake estadounidense con Steve Carell al frente, el actor reflexiona sobre las marcadas diferencias entre ambas versiones.
No todas las adaptaciones logran igualar el impacto del original, y Ralph Ineson lo sabe bien. Ser parte de una de las comedias más influyentes de la televisión puede marcar para siempre la carrera de un actor.
¿Qué dijo exactamente Ralph Ineson sobre ambas versiones?
Ineson recordó que evitó ver la versión estadounidense por años, sintiendo que lo estaban haciendo mal. Hasta que un día la vio junto a su hija y opinó:
"Es diferente, pero es buena. Como tengo un sentido del humor algo retorcido, prefiero la versión británica; es más oscura. Dejarías que Michael Scott cuidara a tu hija de 18 años, pero no estoy seguro de que dejarías que Ricky Gervais lo hiciera. Igualmente, mi personaje es mucho más oscuro que Todd Packer".
Con estas palabras, Ineson destaca la crudeza emocional y la incomodidad calculada como elementos distintivos del original.
¿Por qué describe la versión británica como más "nastier"?
La versión británica se caracteriza por un humor deliberadamente incómodo, cringe y realista. Como señala Ineson, su personaje Finch era un tipo profundamente desagradable, egoísta, manipulador y empecinado.
Comparado con la versión estadounidense, más suavizada y caricaturesca, cuya atmósfera se orienta hacia la comedia ligera y emocionalmente accesible.
¿Qué impacto tuvo el personaje en la carrera de Ineson?
Ineson admite que el papel de Chris Finch fue un arma de doble filo:
"Obtuve a Finchy y no pude deshacerme de él durante unos 20 años".
Sin embargo, también lo describe como un paso decisivo en su carrera, que tras décadas lo llevó a interpretar a Galactus en una reciente película de Marvel. Aunque reconoce que el tipo físico, voz y presencia lo han encasillado en roles de villano, lo valora como su representación más reconocible.
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