A tres meses de la venta de la franquicia de Grupo Orlegi a empresarios de La Paz, la cancha del Estadio Tamaulipas, casa de la Jaiba Brava del Tampico-Madero, luce en abandono, con el pasto crecido y detalles a su alrededor con desperfectos, ante la revisión hecha por los nuevos directivos del conjunto.
Fue exactamente un 20 de abril cuando se hizo oficial la transferencia de la escuadra integrante de la Liga de Expansión Mx, aunado a la mudanza de todos los artículos referentes al TM Futbol Club de las oficinas en el inmueble. Al anunciarse el rescate del equipo pero en la Segunda División, se buscó con el Sindicato Petrolero negociar el comodato.
Así, al darse dicho acuerdo, el directivo Andrés Arriaga acudió al coloso de la Unidad Nacional para revisar su estado físico. Las áreas de ingreso lucen enmontados en una parte, además del césped con porciones del campo de un metro de altura, sin techo en el túnel a los vestidores, así como parte de la zona de palcos y butacas con desprendimiento de la pintura.
Se hará remodelación
El nuevo grupo de inversionistas encabezados por Enrique Badillo, al anunciar su llegada, han sostenido diversos encuentros con la Sección Uno del sindicato petrolero, propietario del estado, a fin de formalizar el nuevo convenio de arrendamiento. Se garantizó una inversión al lugar para tener en óptimas condiciones previo al arranque del nuevo torneo en la Liga Premier.
Cabe señalar que el último partido oficial donde el Tamaulipas fue sede en el futbol mexicano profesional, fue el pasado 6 de abril. Era la jornada 16 del torneo “Grita X la Paz C22” en la división de plata y el entonces plantel dirigido por Gerardo Espinoza (hoy, estratega del Tapatío) igualó a dos goles con los Toros del Celaya.
El Tampico-Madero volverá a la acción a finales de agosto, al visitar primero a los Lobos de la Universidad Latina de México, en Guanajuato y su presentación en casa es el 3 de septiembre, contra el Inter Querétaro.
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