El ex campeón mundial de boxeo, Julio César Chávez, fue sometido a una cirugía menor para retirarle unas piedras en las vías urinarias, procedimiento del que salió perfectamente bien. La noticia fue confirmada por su esposa, Myriam Escobar y su hijo, Omar Chávez, quienes difundieron mensajes en redes sociales para aclarar que la salud del ídolo mexicano no corre ningún riesgo.
En un video grabado desde el hospital, Omar explicó los motivos de la intervención:
“Aquí estamos en el hospital Los Ángeles con el Doc para operar a mi papá… esta vez trae un dolorcito que es ocasionado por una piedra que está en la vía urinaria en el uréter izquierdo y ahorita el doctor se la va a quitar”, relató.
El médico tratante, el urólogo Iván Aguilar, confirmó que se trataba de un procedimiento de rutina:
“Mucho tiempo estoy pendiente de la salud del campeón acá en Culiacán y esta vez trae un dolorcito que es ocasionado por una piedra en el uréter izquierdo, y ahorita se la vamos a quitar”, indicó.
Fiel a su carácter irreverente, Chávez apareció sonriente y bromista antes de entrar a quirófano:
“Bien, bien, gracias doctor, ya están muy listos. Si Dios quiere, pues tenemos campeón para rato. Más saludos. Vamos a hacer un video para que diga cómo está el cheque. Gracias”, comentó.
Horas más tarde, fue Myriam Escobar, esposa del ex púgil, quien ofreció más detalles para tranquilizar a los seguidores. En un extenso mensaje, explicó que todo se trató de un dolor intenso provocado por “unas piedritas” en las vías urinarias, y que el propio Chávez decidió no postergar la cirugía:
“Hoy ya me están llamando mucha gente preocupada… Resulta que ayer le agarró un dolor, fue a checarse y pues resultó que traía unas piedritas ahí que necesitaban sacarse porque dicen que es muy doloroso. Entonces es algo rápido, es algo sencillo y él dijo: ‘de una vez, háganme lo que tengan que hacer’”, relató.
Escobar subrayó que la operación fue exitosa y agradeció las muestras de cariño hacia su esposo:
“Todo está bien, todo está bien… Julio así es, cualquier cosa él te checa y rápido quiere hacer las cosas. Él está súper bien, ya las piedritas se las disolvieron y no hay más de qué preocuparse. Como él dice: hay campeón para rato. Muchas gracias por sus bonitos deseos, se les agradece muchísimo”, dijo.
Finalmente, el propio Julio César Chávez dejó un mensaje corto y contundente a través de redes sociales, fiel a su estilo de guerrero:
“Todo bien amigos, a darle chingadazos”.
Con el alta médica en puerta y rodeado de la atención de su familia, la leyenda del boxeo mexicano se recupera sin complicaciones.

FCM